Avilés, I. URÍA

El último enfrenamiento entre Langreo y Avilés derivó en una tarde para olvidar a causa de la acción del blanquiazul Mimi que propició la pérdida de consciencia del local Ginés, pero ambos equipos regresarán hoy a Ganzábal para demostrar que todo quedó en un susto y continuar con la esencia de la competición concentrada en 10 minutos de la primera parte y toda la segunda mitad. Los de Iván partirán con la ventaja del gol que logró Rubén Menéndez unos 8 minutos antes de que Toyos Acosta ordenase parar el encuentro, y Mimi, si juega, saltará al campo con la tarjeta amarilla consecuencia de la desafortunada jugada que el árbitro recogió en el acta. La entrada al campo langreano será libre.

El encuentro se reiniciará en el punto exacto donde se produjo la acción, con un saque de falta a favor del Langreo. Ginés ya volvió a los terrenos de juego la pasada jornada frente al Lealtad-Isastur y podría disfrutar de minutos. Miguel, que cumplirá su tercer partido de sanción, será baja, mientras que Carli, que vio la quinta frente a loa maliayeses, sí podrá vestirse al no tener carácter retroactivo el castigo. Romero y Juan Valdés serán duda por diversas molestias.

Desde la llegada al banquillo de Iván González el Avilés ha cosechado un empate y una victoria, racha que podría prolongarse si conserva la ventaja de 1-0 con la que afrontaba el partido en Ganzábal hasta la jugada que obligó a suspender el juego. El entrenador probó en el entrenamiento dos variantes tácticas, el 4-2-3-1 y el 4-4-2 que ha utilizado con mayor asiduidad, aunque la decisión final la tomará en los momentos previos al encuentro. El pixueto señaló que espera un partido «muy intenso» dada la imperiosa necesidad de puntos que acusa el rival, que todavía lucha por una plaza de liguilla. «Nuestro objetivo debe ser consegir un triunfo que nos permita continuar en la competición con posibilidades de recortar alguna posición. Estamos cerca de acumular 50 puntos, y nos hace falta motivación para acabar bien la temporada».

El entrenador reconoció que el mayor peligro de los locales será la rapidez de sus hombres ofensivos y de banda, y la pegada. A su favor juega la racha de Héctor, que buscará prolongar su acierto de las dos últimas jornadas con un gol que sentencie a los langreanos. «Es un jugador que entrena al 200 por ciento, estaba claro que le llegaría su recompensa», apuntó Iván.