Oviedo, Javier CUARTAS

La empresaria coruñesa Rosalía Mera Goyenechea, cofundadora y accionista del imperio textil Inditex, propietario de Zara y otras cadenas de moda con proyección internacional, reivindicó ayer el papel de la mujer en la economía y en la empresa. Fue en el Centro Asturiano de Oviedo, donde recibió el premio a la empresaria singular, concedido por la Asociación Empresa Mujer (Asem).

La mujer tiene «características singulares y específicas que la hacen muy capaz para gestionar empresas y crear economía». «Las mujeres tenemos cualidades innatas para dirigir a personas, tomar decisiones, no tener miedo al fracaso, ser flexibles para adaptarnos a los cambios y hacer varias cosas a la vez», señaló Rosalía Mera.

A juicio de la cofundadora de Zara, las personas de sexo femenino tienen «una gran capacidad de adaptarse a los cambios, y esto es muy importante hoy en la empresa, en la que ya no es tan decisiva la planificación como la capacidad de adaptarse a las circunstancias cambiantes. Y además la mujer sabe gestionar. Llevar una familia es como administrar una empresa».

La empresaria coruñesa sostuvo que «la mujer tiene talento y hoy tiene formación, y además desea ocupar los puestos que le corresponden». Sin embargo, para ello aún es necesario, sostuvo, que «la mujer crea en su talento y capacidad». También que persistan, «con carácter temporal», «medidas de discriminación positivas, que todavía son muy necesarias». «Aún hoy», afirmó, «las mujeres tienen que demostrar dos veces su valía y la supremacía en los puestos importantes la siguen teniendo los varones».

Mera Goyenechea defendió las medidas empresariales que faciliten la vida familiar y laboral, pero sostuvo que eso es insuficiente si el varón no entiende también «la igualdad» en la asunción de «las tareas domésticas». A tal fin se congratuló de la campaña de concienciación que postula que «los machos no planchan, pero los hombres sí».

Mera, que participa en empresas de economía social -como Treboré- para apoyar la inserción laboral de personas en riesgo de exclusión social, y que impulsa el Centro de Iniciativas Empresariales Mans, para favorecer a los emprendedores en Galicia, sostuvo que «la empresa debe revertir parte de sus beneficios en acciones sociales».

La cofundadora de Inditex desveló con emotividad que para ella «Asturias tiene connotaciones afectivas muy importantes». «Mi primer amor era asturiano, y eso marca. Pero además Asturias ha sido una referencia de mi infancia. En el barrio marginal de Matadero, en La Coruña, donde nací, había tres o cuatro familias asturianas. Ellas eran una referencia para todos los que vivíamos allí porque tenían un poco más de cultura que nosotros, vivían un poquito mejor y ver cómo se agrupaban y apoyaban mutuamente era admirable. Quizá porque se vieron obligados a vivir en Galicia a causa de la guerra, tenían siempre presente a Asturias, y eso era, sobre todo para mí, muy llamativo. Yo no tenía aldea porque mis padres eran de origen cántabro y vasco, pero ellos conservaban Asturias. Los sábados se reunían a cantar, y nosotros con ellos; y con ellos aprendimos el "Asturias, Patria Querida"». «Son recuerdos estupendos», precisó.

La presidenta de Asem, Kike Gómez Haces, hizo entrega del galardón a Rosalía Mera. El resto de los premiados fueron Julio González Zapico, director general de Comercio, Autónomos y Economía Social del Principado, que recibió la distinción de manos de la alcaldesa de Gijón, Paz Fernández Felgueroso; Antonio González, director general de Trabajo de Asturias, a quien le hizo entrega el director general de LA NUEVA ESPAÑA, José Manuel Vaquero, y el Centro Asturiano de Oviedo, que recogió el vicepresidente primero de la institución, José Manuel Cañal Duque, a quien se lo entregó el presidente de FADE, Severino García Vigón. Gómez Haces hizo también entrega a Carmen Rodríguez, una de las fundadoras de Asem, del reconocimiento de mentora honorífica.