Oviedo, Javier CUARTAS

La compañía asturiana Duro Felguera, que opta a la instalación, a la gestión y a la explotación de parques de generación de energía eólica en Galicia y en el occidente de Asturias, se ha aliado con la compañía eléctrica Endesa para el desarrollo conjunto de este negocio, inédito en la actividad histórica del grupo asturiano, con siglo y medio de experiencia industrial.

Duro Felguera, que meses atrás constituyó la filial Eólica del Principado para tomar posiciones en el negocio de generación eléctrica mediante la gestión y la explotación de parques de aerogeneradores, ha dado entrada en esta sociedad, con el 40%, a Endesa, la segunda eléctrica española y que está participada, desde el último proceso de opas, por la energética italiana Enel, que posee el 67% de su capital, y por la compañía constructora y de servicios española Acciona, titular del 25%. Acciona es propietaria a su vez de una importante división de energía eólica. Duro controlará el 60% de Eólica del Principado.

La entrada de Duro Felguera en el negocio eléctrico forma parte de una estrategia diversificadora diseñada por su presidente, Juan Carlos Torres Inclán, cuyo propósito es acceder a actividades complementarias del negocio tradicional y que aporten al grupo ingresos recurrentes y no sujetos a la coyuntura del ciclo económico y de la cartera de contratación de proyectos y carga de trabajo.

Eólica del Principado, la nueva filial de Duro Felguera para intervenir en el negocio de la generación eléctrica de origen eólico, ha presentado ya ofertas para instalar cuatro parques de molinos de viento en el occidente de Asturias, con una potencia total de 100 megavatios, una vez que el Gobierno del Principado optó por poner fin a la moratoria que pesaba sobre este subsector energético en la región.

A su vez, Eólica del Principado también concurre en Galicia, en este caso en alianza con una empresa leonesa con implantación en la zona, para promover dos parques eólicos de 50 megavatios cada uno en Orense. La inversión total de Eólica del Principado en Asturias y en Galicia, de prosperar y recibir autorización para todos sus proyectos, se estima en unos 260 millones de euros.

La voluntad de Duro de entrar en el negocio de producción energética fue anunciada por su presidente en la última junta general de accionistas de la compañía, el pasado mes de mayo.

La alianza con Endesa, que aporta su experiencia en generación eléctrica, corona una larga trayectoria de colaboración entre ambos grupos. Duro Felguera ha sido en los últimos años uno de los principales adjudicatarios por la eléctrica, que ahora preside José Manuel Entrecanales y cuyo consejero delegado es Rafael Miranda, de importantes proyectos de construcción de plantas de generación, sobre todo centrales de ciclo combinado.

Duro, que tiene una consolidada experiencia en este tipo de instalaciones, es también suministradora de otras compañías eléctricas, caso de la asturiana HC Energía, filial de la energética portuguesa EDP. Duro, en alianza con la multinacional Almston, fue la adjudicataria de la primera central de ciclo combinado de Asturias (Soto 4, de HC Energía) y esta misma compañía les acaba de encomendar la construcción de una instalación gemela, la futura Soto 5, ambas en Soto de Ribera, en las proximidades de Oviedo.

La introducción de Duro en el negocio de generación eléctrica de origen eólico no se limita a España. La compañía asturiana, presente en México desde 1980, se ha aliado con socios de aquel país, titulares a su vez de la compañía Gas de Monterrey, entre otras actividades, para tomar posiciones en el negocio energético de aerogeneración en el mercado mexicano.

El interés de Duro por el sector de la energía no es nuevo. En 2006 tomó el 10% de la sociedad Green Fuel Extremadura, promotora de la construcción y la posterior explotación de una planta de producción de biodiésel en la comunidad autónoma extremeña. En esas mismas fechas, Duro promovió su propio proyecto de planta de generación de biodiésel en El Musel, que posteriormente, coincidiendo con el fortísimo encarecimiento de las materias primas, canceló y reconvirtió en un proyecto de instalación, en ese mismo emplazamiento portuario, de un conjunto de depósitos para el almacenamiento de todo tipo de combustibles.

Duro también participa en Andalucía, aunque de forma minoritaria, en una iniciativa fotovoltaica.

En el caso de la futura planta regasificadora de El Musel, Duro ha mostrado su aspiración a participar en su construcción, pero también llegó a expresar su interés en tomar alguna participación accionarial en la sociedad titular de la instalación, promovida por Enagás, gestora técnica del sistema gasista español y titular de otras regasificadoras en Barcelona, Cartagena y Huelva.

Pero la introducción de Duro en el negocio energético no es la única apuesta inversora de la compañía. Con una creciente vocación como ingeniería, el grupo asturiano adquirió hace un año la ingeniería Montajes Eléctricos Industriales (MEI), de La Felguera, cuya adquisición negociaba desde hace meses. Simultáneamente y con posterioridad, el grupo industrial asturiano mantuvo conversaciones con otras sociedades del ramo para reforzar su implantación en ese ámbito de actividad.