Duro Felguera continúa las negociaciones con varios posibles inversores para su incorporación como accionistas a la sociedad y las expectativas de llegar a un acuerdo con alguno de ellos como socio “estratégico” son favorables, según explica el nuevo consejero delegado del grupo, el ingeniero gijonés Jaime Argüelles, en un mensaje en vídeo difundido ayer a los accionistas de la empresa.
Los inversores, con los que se está hablando con el apoyo del banco de inversión_Alantra, tienen perfil industrial y responden a un patrón que pueda contribuir al relanzamiento de Duro con la “aportación de proyectos y sinergias en la contratación de cartera” y de liquidez “para robustecer nuestro patrimonio y situación financiera”, afirma Argüelles. Las conversaciones se están desarrollando “con distinto grado de avance”, según el primer ejecutivo de la ingeniería, que se declaró “optimista” sobre el resultado de las gestiones.
La entrada de un accionista de referencia es un objetivo prioritario del grupo una vez que el Estado, a través de Fondo de Rescate de Empresas Estratégicas, ha comprometido la aportación de 120 millones a la sociedad –de los que ya ha hecho entrega de los primeros 40 millones– y después de haber logrado el también vital acuerdo con el sindicato bancario. El refuerzo accionarial y la recapitalización del grupo son esenciales para garantizar sus sostenibilidad futura, dada la atomización actual del capital, el hecho que ningún accionista está presente en el consejo y que el apoyo público es transitorio y tiene fecha de caducidad.
Plan estratégico. Argüelles, que fue nombrado primer ejecutivo el 30 de abril tras el rescate por el Estado y el acuerdo de refinanciación y reestructuración de la deuda con la banca acreedora, postula un modelo de empresa que permita la entrada “con fuerza” en nuevos sectores y mantenga y refuerce sus “fortalezas” en los negocios tradicionales de la compañía: diseño y construcción de plantas convencionales de gas, instalaciones industriales de manejo de graneles sólidos en minerales y otros productos, y petróleo y gas (“que todavía tiene mucho recorrido en el mundo”, según Argüelles), y el área de servicios.
El ejecutivo y la presidenta llaman a los accionistas a que apoyen en la junta el rescate y el acuerdo con la banca, vitales para la "viabilidad" de la compañía
Según el plan de viabilidad –“que estamos convirtiendo en un plan estratégico”, señaló–, se va a “seguir utilizando la imagen de marca y las referencias reputacionales de la compañía y el saber hacer de nuestro equipo de personas con alta cualificación y alto grado de conocimiento” para perseverar en las actividades que han sido capitales hasta ahora en el grupo, al tiempo que se va a hacer un esfuerzo de penetración en los negocios que hoy “son tendencia en el mundo” y hacia los que están orientados en Europa los fondos de reconstrucción. Se trata, dijo, de la economía “verde, sostenible, circular y respetuosa con el medioambiente”, como son, explicó, “los proyectos de almacenamiento, especialmente con hidrógeno verde y también con otros tipos”, y que son en los que “está el futuro”.
A ambas áreas se suma la prevista potenciación –“con más intensidad” que ahora– de la división de nuevas tecnologías y digitalización con la filial Epicom y el área de almacenamiento inteligente. “Tenemos, por lo tanto, un amplio abanico de oportunidades, en las que tenemos que sacar lo mejor de cada una de ellas. Es una gran oportunidad” que Duro debe afrontar, señaló el consejero delegado, “con nuestra mayor fortaleza, que es nuestro equipo de personas”, al que reclamó “trabajar muy unidos” y un “adaptación cultural” para adecuarse a las nuevas necesidades._Se trata, afirmó, de ser capaces de “desarrollar las nuevas líneas de negocio y mejorar la forma de hacer de las tradicionales para llevar la nueva Duro Felguera a una nueva dimensión y a unos números e intangibles diferentes”.
Proyectos. El consejero delegado afirma en su mensaje que se está trabajando “de forma intensa en controlar el presente y el pasado de proyectos en situación crítica” y cuya solución “es clave”.
Argüelles y la presidenta no ejecutiva de Duro, Rosa Aza, solicitaron el apoyo de los accionistas para que sea posible aprobar en las asambleas ordinaria y extraordinaria convocadas para el día 30 en Gijón cuestiones cruciales para el futuro inmediato de la sociedad: el rescate por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y el acuerdo con la banca, el segundo de los cuales es condición a su vez para el desembolso total de los 120 millones de ayuda comprometido por el Gobierno.
Para que la junta general de accionistas pueda aprobar estos extremos vitales para la viabilidad de Duro se necesita la asistencia de al menos el 25% del capital y que el apoyo sume al menos dos tercios del voto emitido.
Los acuerdos que se plantearán supondrá ampliar hasta 2027 el plazo de vencimiento de las obligaciones convertibles de la clase “A” que fueron suscritas por la banca acreedora en los acuerdos de refinanciación y reestructuración financiera de 2018 para que coincida con una nueva emisión de obligaciones convertibles en acciones cuya emisión (clase “C”) se va a proponer, así como cancelar las de tipo “B” (también de 2018) por un importe 142,2 millones. La nueva emisión, por 52 millones, daría derecho a sus tenedores a suscribir en su caso el 13% del capital de la compañía en caso de conversión.
Argüelles y la presidenta no ejecutiva llamaron a los accionistas a que den su apoyo decisivo en las juntas para que la compañía les pueda “aportar valor”. “Estoy muy orgulloso y muy responsabilizado de asumir esta función para ser el líder de la solución de nuestra empresa y desarrollar el futuro de la nueva Duro_Felguera”, dijo Argüelles.
