Barbón, sobre el incendio de Arcelor: "Los trabajadores y la empresa tienen todo mi apoyo"

"Estamos a disposición del Gobierno para apoyar cualquier iniciativa que despeje el futuro de la empresa", afirma Diego Canga, candidato del PP

Adrián Barbón en Cogersa

Adrián Barbón en Cogersa / M. R.

Mariola Riera

Mariola Riera

"Quiero mostrar mi solidaridad y apoyo a los trabajadores y a la empresa". Así lo ha afirmado esta mañana el presidente del Principado, Adrián Barbón, en una visita a las instalaciones de Cogersa. "Por suerte, esto hay que reconocerlo como punto de partida, no hubo daños personales, que son siempre los más graves", destacó del incidente.

Estas palabras del Presidente del Principado llegan después de que ayer por la tarde un incendio en el horno alto A de Arcelor obligase a desalojar la instalación. Ahora la empresa deberá valorar si el horno, que estaba previsto que se "jubilase" el año que viene, ha quedado inutilizable o tiene reparación. "Ahora la empresa y su dirección tienen que afrontar un imprevisto importante para todos. Cuentan con todo mi apoyo", recalcó Barbón.

También se ha referido al asunto el consejero de Industria, Enrique Fernández Rodríguez. "Estamos en contacto con la empresa para apoyar en todo lo necesario. Se trata de una instalación fundamental para la industria asturiana. Cuando estuvo parado se resintieron los indicadores de la actividad industrial y económica asturiana. Es muy importante para la región", aseguró al tiempo que deseaba "que su puesta en marcha pueda darse lo antes posible".

Diego Canga, candidato del PP al Principado, también mostró esta mañana su apoyo "a los trabajadores y a la empresa". "Arcelor es fundamental para el futuro de la industria asturiana y de la región: supone el 12% del PIB regional y genera miles de empleos", aseguró al tiempo que tendía su mano al gobierno autonómico: "El PP siempre va a defender los intereses de Asturias y, por ello, estamos a disposición para apoyar cualquier iniciativa que despeje el futuro de Arcelor".

El siniestro se desencadenó a las 17.50 horas durante una operación rutinaria de sustitución de una tobera, con el horno en parada técnica. Fuentes laborales explicaron que la instalación llevaba varios días inestable (con problemas de control de temperatura) que se estaban tratando de dominar. Durante la maniobra se produjo una desestabilización del proceso, que dio origen a una reacción violenta dentro del horno, informó la empresa, que causó varias explosiones y una gran inflamación, señalaron fuentes laborales.

Las imágenes fueron muy impactantes por el alcance de las llamaradas y por la aparatosidad del humo que emanó de la instalación hasta que se sofocó el fuego. El incendio se limitó en todo momento al horno y no alcanzó a otras zonas de la factoría.

No obstante, y por precaución, la evacuación afectó tanto a los 20 trabajadores del turno de tarde del horno dañado como a otros 30 empleados de oficinas, edificios auxiliares e instalaciones adyacentes, a los que por su proximidad a la planta siniestrada se ordenó el abandono de la zona.

La primera hipótesis apuntaba a que se hubiera producido una perforación del crisol, situado en la parte inferior del horno y en el que se deposita el arrabio (mineral de hierro fundido), lo que habría dado lugar a una salida no controlada del material incandescente, origen del incendio, que habría afectado, según algunas versiones recabadas, al sistema eléctrico y a otras partes de la instalación.

Al final, todo apunta a que el arrabio se fugó al exterior por una tobera existente en la zona norte, situada a la altura del crisol, aunque se desconoce si este equipamiento crucial ha podido resultar dañado.

De ello y de otros posibles desperfectos en la instalación dependerá el impacto económico del siniestro, la viabilidad de la reparación en una instalación a la que le restaban pocos meses de vida útil y, por consiguiente, la afectación a la producción.

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