La ingeniería energética Tresca inicia su actividad en Silvota con 25 empleos
La empresa dice que su emplazamiento será permanente y que Asturias es estratégica y servirá para acceder a otros mercados
La ingeniería Tresca, con sede en León y sucursal en Madrid, ha iniciado sus operaciones en Asturias con una "oficina permanente" en el polígono de Silvota, dotada inicialmente con 25 profesionales, y cuya pretensión es que desde las instalaciones en la región el grupo acceda a otros territorios.
Francisco Carro, director general de la compañía, destacó que "Asturias tiene un carácter estratégico" para Tresca, una ingeniería especializada en consultoría industrial y energética, y con una posición relevante en economía verde y energías limpias, caso del hidrógeno, amoníaco, metanol y biocombustibles.
La plantilla de la oficina de Silvota está integrada por personal técnico asturiano, en unos casos trasladado desde la sede de León y en otros incorporado mediante nuevas contrataciones.
Tresca tiene una larga vinculación con clientes industriales asturianos. "Necesitábamos acometer un plan de expansión y buscábamos un emplazamientos con dos requisitos: que tuviera un ecosistema industrial e ingenieril, y talento técnico", dijo Carro. Asturias cumple ambos requisitos, señaló, y además la región "es un fuerte exportador de conocimiento y de materia gris, y queremos participar de esa exportación a otros lugares".
La presencia en Asturias de industrias que ya eran clientes de Tresca "desde siempre" también favoreció la decisión. "Era un paso natural. En Asturias los clientes y los administraciones siempre nos han tratado muy bien".
La compañía, fundada en 2001, cuenta con un centenar de empleos y tiene una fuerte especialización en industria pesada, de proceso, química y farmacéutica, además de su focalización en energía y en las nuevas fuentes limpias.
En la actualidad está participando, entre otros clientes, en los trabajos del futuro emplazamiento de hidrógeno verde de EDP en Aboño.
Los 25 empleos en Asturias se suman al centenar de profesionales con los que ya contaba la empresa hasta ahora en León y Madrid. Ambas dependencias se mantendrán con su actual tamaño. Según Carro, la llegada a Asturias es "una expansión" en el crecimiento de la empresa y "no una deslocalización" de empleos hacia la nueva oficina en el Principado.
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