El PP espera el primer gran revés para el Gobierno: "Bienvenidos a su realidad"

“Hoy el PP no tiene ninguna presión. Que se cueza el Gobierno en su propia salsa”. Los diputados de Alberto Núñez Feijóo llegaron al pleno del Congreso (celebrado en el Senado por obras en la Cámara Baja) sin tensión ni excesiva gestualidad. Todo lo contrario a la bancada del Gobierno y algunos de sus socios, conscientes de que las cosas se estaban complicando cada vez más. A lo largo de la mañana el PP fue interviniendo en los tres decretos del Ejecutivo con reproches a Pedro Sánchez por el camino elegido.

Jaime de Olano, encargado de defender la posición en el decreto con la extensión de medidas anticrisis, empezó su turno en la tribuna con una frase muy clara: “Bienvenidos a su realidad. Esta es la realidad que Sánchez quiere para España y la que ha elegido”. A continuación respondió al diputado socialista Pedro Casares, que acusó al PP de falta de sentido de Estado por no respaldar el texto del Gobierno: “Con insultos vienen a pedirnos apoyo”. La bancada popular apludió.

El PP no se movió de su posición y exigió hasta el último momento que retiraran el decreto y aprobaran uno nuevo con las tres condiciones de los conservadores para dar su sí: la bajada del IVA a la carne, el pescado y las conservas; que se mantenga en el 5% a la luz y el gas evitando la subida paulatina propuesta por el Gobierno; y la deflactación del IRPF para rentas de menos de 40.000 euros. “Ya se lo dijo Feijóo Cuando le falle el independentismo, no nos busque a nosotros”, reiteró Olano.

En el PP apostaron por un perfil bajo durante toda la mañana, entendiendo que la presión y el foco debía recaer en todo momento sobre la derrota parlamentaria del Ejecutivo. “El recorrido hasta este pleno y el espectáculo de hoy es una derrota en sí mismo”, apuntalaban en el equipo de Feijóo. “Nunca una legislatura ha comenzado así”, zanjaban.

Los diputados populares también aprovecharon sus turnos de intervención para insistir en esa idea: “Por mucha chulería que veamos son el Gobierno más débil de la democracia”. La pregunta de Olano al ministro Félix Bolaños también fue directa: “Lo que les falta por decirnos es hasta dónde están dispuestos a llegar para complacer a Nogueras (en referencia a la portavoz del partido de Puigdemont)”. 

En los decretos anteriores (el relativo a la digitalización de la Justicia y el del Ministerio de Trabajo con la reforma del subsidio, de los que dependen fondos europeos) el PP siempre dejó claro que votaría en contra. El diputado por Tarragona, Pere Huguet Tous, lanzó duras críticas por el abuso del real decreto ley para asuntos enquistados en el Congreso por la incapacidad negociadora del Gobierno. “Usurpan las facultades legislativas de este parlamento. ¿Dónde está la extraordinaria y urgente necesidad?” se preguntó, teniendo en cuenta que algunos puntos recogidos en el real decreto ley entrarán en vigor en el año 2025. Los mismos argumentos utilizó la diputada gallega Irene Garrido en el decreto de la vicepresidenta Yolanda Díaz.

Fuentes populares insistían desde primera hora de la mañana en que podía ser la primera gran derrota del Gobierno, “preso de su elección de socios”. Para el PP se confirma ya lo que avanzaron en la investidura de Sánchez con aquella frase: “Será un calvario”.