Sumar

IU, Más Madrid y Compromís se unieron frente a Yolanda Díaz para forzar un acuerdo conjunto en las europeas

Las formaciones presionan a Sumar con una propuesta única que relegaba a los de Ada Colau al quinto puesto

El movimiento provocó malestar en los de Díaz, que precipitaron el acuerdo con Compromís para desactivar el frente común

La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. / EP

Ana Cabanillas

Sumar ha diseñado el puzzle de las elecciones europeas del 9 de junio con una cascada de acuerdos que fueron desencallando en la tarde de este jueves. El desenlace llegó tras ciertas turbulencias en la coalición, después de que Más Madrid, IU y Compromís abrieran conversaciones al margen de Yolanda Díaz para elaborar una propuesta de acuerdo conjunta, donde los Comunes de Ada Colau quedaban relegados a la quinta posición.

El documento, donde IU ocupaba el segundo puesto, Compromís el tercero, y Más Madrid el cuarto, se remitió este miércoles al partido de Yolanda Díaz, que acogió con irritación el que una mayoría de partidos aliados se hubieran organizado de manera independiente a Sumar. El equipo negociador encabezado por el Josep Vendrell, coordinador de Sumar y hombre de confianza de Díaz, desactivó rápidamente el 'pack' presentado.

Y lo hizo cerrando un acuerdo con Compromís, al que cedió finalmente el número tres de la lista, una posición que hasta el momento se había negado a darle. De no haber sido por la presión conjunta, creen algunos, esta posición podría haber quedado en cuarto lugar. Una vez sellado el primer acuerdo, y de manera inmediata, Sumar fue abriendo reuniones con el resto de actores para cerrar los acuerdos, de manera que el número dos lo ocupará Jaume Asens, de los Comunes, y el cinco será para Más Madrid, que tiene aún que elegir su candidato. El cuarto puesto será previsiblemente para Izquierda Unida, que debería decidir en su ejecutiva si acepta o no la oferta. Hasta ahora, Sumar le había ofrecido el quinto puesto, que había sido rechazado.

Órdago de Compromís

Las negociaciones para una candidatura conjunta en la cita de las europeas llevaban semanas en marcha, sin que se produjeran avances sustanciales hasta este martes, cuando se reactivaron las negociaciones tras el pulso abierto por Compromís, que desde hacía meses venían exigiendo el tercer puesto de la lista, y que presionaron con una ejecutiva este martes que fue finalmente aplazada, donde estaba previsto decidir si concurrir con la lista de Yolanda Díaz o descolgarse de la candidatura para ir en solitario. El intento de presión, al que después se sumaron Izquierda Unida y Mónica García, surtió efecto.

Sólo entonces, con la amenaza de ruptura y una propuesta de varios partidos sobre la mesa, comenzaron "las negociaciones de verdad" con Sumar, según señalan fuentes de la coalición. El partido valencianista, que hasta entonces sólo había tenido por respuesta el rechazo a otorgarles el tres, logró finalmente que cedieran a sus exigencias. El primer acuerdo desembocó en que se fueran cerrando en cascada el resto de pactos con otras formaciones.

Papel de Comuns

La unión entre IU, Más Madrid y Compromís para afrontar las negociaciones de manera conjunta era un intento de aunar fuerzas frente a Yolanda Díaz y presionar para alcanzar un acuerdo satisfactorio para todas las partes, después de semanas con las negociaciones atascadas. La multitud de partidos concurrentes y las expectativas electorales menguantes de la coalición -Sumar ha pasado del 12,3% de las generales al 8,2% del CIS- llevaron a que los primeros puestos fueran los más disputados, complicando a Sumar la posibilidad de tener no sólo a la candidata, la independiente Estrella Galán, sino a una segunda persona -María Eugenia Rodríguez Palop- en el podium de la candidatura.

De fondo también había otra idea, la del desagravio frente a los Comunes, ante la expectativa -finalmente cumplida- de que ocuparan el segundo puesto de la lista. En la misma tarde de este jueves, Sumar se precipitó a hacer oficial el acuerdo con el partido catalán. A nadie se le escapa en la coalición de Sumar el importantísimo peso del partido de Ada Colau en la configuración del proyecto. Es de largo el actor que más presencia tiene en Sumar, al contar con una portavocía en el Congreso, un ministerio en el Gobierno, la portavocía del partido y la coordinación interna de la organización.

Iñigo Errejón, Yolanda Díaz y Aina Vidal el lunes, en la reunión del grupo parlamentario Sumar.

Iñigo Errejón, Yolanda Díaz y Aina Vidal el lunes, en la reunión del grupo parlamentario Sumar. / EFE

Además, en la construcción de Sumar, Yolanda Díaz tuvo un gesto significativo, al comprometerse a no crear ninguna estructura en territorio catalán. Sumar delegaba así toda su acción política en los Comunes. Una situación que generó fuertes tensiones con Más Madrid, que reclamaba las mismas condiciones que para Cataluña y exigía que Sumar renunciase a estructuras propias en la Comunidad de Madrid. El choque se saldó finalmente con una fórmula mixta y abierta a interpretaciones donde Díaz reconocía a los de Mónica García como la referencia en el territorio, pero se abría a la creación de espacios conjuntos en el futuro.

Mónica García participó ya en el primer acto de lo que después sería Sumar, en aquel acto de Valencia en noviembre de 2021 que congregó también a Colau, Díaz y Mónica Oltra. Desde entonces, y a partir desde el lanzamiento de Sumar, han prestado su apoyo logístico a la construcción del nuevo partido. En las generales logaron dos diputados, aunque uno de ellos, Iñigo Errejón, ya se ha integrado en Sumar y dejado de representar a la formación madrileña. Ahora, con un quinto puestos en las listas europeas, tampoco dan por asegurada su elección.