La Policía Nacional continúa avanzando en la investigación del asalto que tuvo lugar el pasado lunes en el estanco de Pumarín situado en el número 34 de la avenida Gaspar García Laviana. Los agentes sospechan que tras el suceso se encuentra una banda especializada que habría abandonado la región tras conseguir un botín de cajetillas de tabaco valoradas en más de 4.000 euros. La Policía trata de averiguar ahora si estos delincuentes -tres hombres según las primeras investigaciones-, cometieron algún otro robo en Gijón días antes del alunizaje en el estanco.
Los delincuentes llevaron a cabo el asalto de Pumarín en menos de cuatro minutos. Invadieron la acera con un coche que horas antes habían robado en Avilés, reventaron con el turismo la puerta de entrada del establecimiento, cogieron el tabaco y abandonaron rápidamente el barrio. Era la una y media de la madrugada. Los ladrones se habían cerciorado de que a esas horas no había testigos en la zona y de que el estanco se encuentra situado cerca de las principales salidas por vía rápida de la ciudad. Este hecho facilitó que los delincuentes huyeran rápidamente del casco urbano sin ser arrestados.
