La forista Lucía García Serrano, quien fuera concejala de Urbanismo en el anterior mandato municipal, ha recurrido al Defensor del Pueblo para conseguir una respuesta del Ayuntamiento que gobiernan sus antiguos compañeros de partido a una reivindicación planteada hace más de un año. Y que incluye una petición de indemnización económica de 78.110,76 euros por la situación de incompatibilidad que le impide volver a su trabajo de arquitecta con estudio en Gijón hasta junio de 2017.

Al margen de la concesión o no de esa indemnización -el planteamiento que se hace llegar desde la concejalía de Hacienda y Administración Municipal es proclive a la denegación aunque la decisión final será del Pleno-y de la opción de la exconcejala de llevar el caso a los tribunales, la decisión de García Serrano de buscar el amparo del Defensor del Pueblo tiene que ver con el prolongado silencio a su petición.

Una petición que se registró en junio del año pasado después de que el secretario municipal le confirmara a la concejala esa situación de incompatibilidad y le marcara el camino que la ley establece para esos casos. García Serrano cerró su estudio gijonés como arquitecta en 2011 al asumir un cargo en el gobierno local, y en concreto en la concejalía de Urbanismo, con exclusividad. Ello le genera una limitación legal para volver a ese trabajo. A partir de esta situación, la forista pide una indemnización que estima en una cantidad equivalente al sueldo que un edil con dedicación parcial tenía en el gobierno donde ella estuvo: 39.055,38 euros anuales multiplicados por los dos años de incompatibilidad para su labor profesional.

La falta de respuesta llevó a la exconcejala a reiterar la petición en octubre, volver a hacerlo en enero de 2016 con petición de acceso al expediente y, ya en marzo, tramitar una queja ante la oficina municipal y otra ante el Defensor del Pueblo, que la admitió a trámite el pasado mes de abril.

Sólo hace unos días, el 6 de mayo, García Serrano firmaba el último escrito oficial dirigido a la alcaldesa, Carmen Moriyón. Allí pide acceso al expediente y un acuerdo sobre la declaración de incompatibilidad y la indemnización correspondiente. Además, la exconcejala solicita "en aras al derecho que me asiste" que se le comunique la identidad de las autoridades y funcionarios que ha participado en la tramitación de su expediente y "la exigencia de responsabilidad por las anomalías en la tramitación".

Lucía García Serrano ocupó una de las concejalías fuertes en el primer gobierno de Carmen Moriyón. Al frente del urbanismo municipal asumió, entre otros temas, la revisión del Plan General de Ordenación o la puesta en marcha de la línea de subvenciones a la reforma de barrios degradados que Foro presentó como iniciativa estrella de su programa electoral. Sin embargo, de cara a diseñar a su equipo para las siguientes elecciones Carmen Moriyón prescindió de García Serrano.