Analizar la relación entre la contaminación atmosférica y la salud respiratoria de los niños gijoneses es el objetivo de un convenio de colaboración que, desde ayer, vincula al Ayuntamiento de Gijón con la Universidad de Oviedo dentro del programa Inma (Infancia y Medio Ambiente). Un estudio que ya se ha desarrollado en el área sanitaria de Avilés, donde se demostró la relación entre la polución y el déficit de atención infantil.

En el caso de Gijón la idea es contactar a lo largo de un año con 500 embarazadas y hacer un seguimiento tanto de su embarazo como de los dos primeros dos años de vida de sus bebés. Dos técnicos de laboratorio contratados por el Ayuntamiento se encargarán en próximas semanas de captar a las mujeres en los hospitales de Cabueñes y Jove a través del servicio de ginecología. Ese es sólo el principio de un largo proceso ya que aunque el convenio actual sólo dura hasta mediados del año que viene el objetivo es poder mantener la colaboración a lo largo de cuatro años.

La participación en el proyecto es voluntaria y el primer elemento de trabajo será un exhaustivo cuestionario a las mujeres sobre sus hábitos de alimentación y vida. También se trabajará con las muestras físicas (sangre, orina...) que se realicen en los hospitales en los controles normales de cada embarazo, según explicaba ayer la directora del área municipal de Sostenibilidad y Cambio Climático, Clara Pilar González-Pedraz. El seguimiento a los niños se hará en los controles pediátricos.

Toda esa información será analizada y cruzada con los datos sobre niveles de contaminación que se detecten durante ese tiempo en las estaciones medidoras repartidas por Gijón vinculando a cada madre o bebé con su zona de residencia para ver las diferentes incidencias.

El estudio se realiza desde la Universidad de Oviedo, en colaboración con el Instituto de Salud Carlos III, y la participación municipal se concreta en la cesión de esos dos técnicos y del material necesario para las pruebas. De hecho, las muestras recogidas en los servicios de enfermería y ginecología durante los controles en los hospitales estarán en el laboratorio del área de Medio Ambiente del Ayuntamiento hasta que se trasladen a dependencias universitarias para su análisis.

"Para nosotros es un convenio muy importante por la repercusión que tiene sobre la salud de los niños de Gijón", destacó el forista Fernando Couto.