Las absoluciones del "caso Musel", firmes al no ser recurridas

Solo la acusación particular impugnó la sentencia en lo relativo a la condena en costas

M. C.

La absolución de todos los acusados del "caso Musel" ha cobrado firmeza después de que ninguna de las acusaciones haya impugnado esa decisión de la sección primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que dictó sentencia el pasado 27 de julio.

Ni la Fiscalía, ni Abogacía del Estado, ni Ocan (que ejerció la acusación popular) recurrieron la sentencia. El único recurso que se presentó, el de la acusación particular que representaba a la asociación de vecinos del Alto Aboño, tampoco impugnó la absolución, sino que se ciñe a recurrir la imposición de las costas procesales que le endosó el tribunal al considerar que su acusación había sido temeraria, una condena en costas que le obliga a pagar también al abogado y al procurador de la defensa del expresidente de El Musel, Fernando Menéndez Rexach, único contra quien iba por la expropiación del Alto de Aboño. Lo único que están ahora mismo en cuestión tras ese único recurso, por lo tanto, es si la acusación particular tiene que hacer frente o no al pago de esos honorarios.

La sentencia exculpó a los cuatro excargos públicos procesados, además de Rexach el exdirector de El Musel, José Luis Díaz Rato; el exsecretario de Estado de Transportes, Fernando Palao y el expresidente de Puertos del Estado, Mariano Navas, así como a los 16 directivos de la UTE Dique Torres, de las empresas que la integraban o de sus matrices que también se sentaron en el banquillo de los acusados.

La sentencia llegó más de ocho años después de que se iniciara una investigación penal en torno a las obras de ampliación de El Musel, con acusaciones de delitos de fraude y prevaricación. La magistrados, en cambio, concluyeron que "no hay constancia alguna de que la actuación de los acusados o de alguno de ellos obedeciera al propósito de defraudar a un ente público", señalando que las pruebas apuntan a que los responsables portuarios sólo buscaban llevar "a buen fin una obra ingente".