Cada vez hay más perros potencialmente peligrosos en Gijón: el año pasado se concedieron un 10% más de licencias

A lo largo del pasado 2023 en Gijón se concedieron 158 licencias de tenencia de perros potencialmente peligrosos. Es algo más del 10% de los 1.410 que ahora mismo están registrados con esa consideración en la ciudad y ejemplifica la tendencia al alza de la presencia de este tipo de canes en las calles de Gijón. Eso sí, siguen siendo un número mínimo dentro de los 37.673 perros que hay en Gijón según el Registro de Identificación de Animales del Principado de Asturias (Riapa).

Estos datos y la preocupación municipal por los problemas de convivencia que puedan generar perros de uno u otro tipo los presentó el edil responsable de Bienestar Animal, el popular Rodrigo Pintueles, en el marco de un debate en comisión donde la oposición municipal preguntó por el ataque sufrido por la deportista Carmen Corujo en Tremañes.

Un ataque de dos perros, en principio no pertenecientes a una raza potencialmente peligrosa, que alcanzó a dos personas y que sirvió para desvelar que solo unos días antes había habido un incidente con un perro de la misma persona que había devenido en denuncia y una multa de 600 euros. Ademas, al ir a la casa para llevarse a los perros al albergue de Serín se encontraron un total de diez canes sin registrar y sin cartillas de vacunación. Una casa que el propietario de los animales no ocupaba legalmente. Son los últimos casos de los 39 ataques de perros cuantificados en la ciudad entre enero de 2023 y la actualidad.

En cuanto al incremento de perros de razas potencialmente peligrosas fuentes municipales consideran que tiene que ver con que están de moda y el hecho de que muchos no se registren se vincula a que se utilizan de manera ilegal para la cría. De hecho se han constatado caso de canes llevados al albergue, lo que conlleva su castración, y que tras esa situación no son recogidos por su propietario.