La hacienda municipal da por perdido el cobro de 7,5 millones de ingresos

A algo más de 7,5 millones se eleva la cifra de derechos de difícil o imposible recaudación que se incluye dentro del cierre de cuentas del Ayuntamiento para 2023. Una cifra que desde la jefatura del servicio de Tesorería se presenta como información a los ediles de los grupos políticos de la Corporación en la sesión de la comisión de Hacienda de esta semana. Ese dinero que el Ayuntamiento da por perdida se corresponde con derechos adquiridos desde finales de los años ochenta del siglo pasado. De hecho, la lista comienza con unos humildes 28,92 euros de 1989. Tasas, licencias y, sobre todo, multas giradas pero no cobradas conforman el grueso de lo que vecinos y empresas le deben a su ayuntamiento.

Desde 2013 las entidades locales tienen la obligación de informar al Pleno y al Ministerio de Hacienda sobre esos derechos de difícil o imposible recaudación, aplicando sobre ellos porcentajes de minoración del 25, 50, 75 o 100% dependiendo del tiempo transcurrido desde el presupuesto al que se correspondían. En el caso del expediente que ahora va a comisión camino del Pleno el saldo de partida era de 6.930.182,46 euros de imposible o difícil recaudación a finales de 2022 sobre unos derechos reconocidos pendientes de cobro de 13.962.152,30 euros.

A esos 6,9 millones de dotación inicial se le aplican ajustes positivos y negativos. En este caso para 2023 con 585.738,23 euros de ajuste positivo –no hay nada que restar– lo que eleva la partida a esos 7,5 millones. La mayor partida de ese ajuste a mayores, con unos 390.000 euros, se corresponde con sanciones por infracciones de ordenanzas, fundamentalmente la de tráfico, del ejercicio de 2021.

A esa misma comisión de Hacienda van dos propuesta de alteración jurídica y venta de terreno municipal para instalar un ascensor –uno en la calle Cataluña y otra en la calle Ronda Exterior–y la comparecencia de Jaime Fernández-Paíno, director general de Alcaldía, Coordinación y Proyectos de Ciudad.