Los retos del gobierno conjunto

Después de cuatro años de enfrentamiento y división, el gobierno Foro-PP está siendo una gran oportunidad para demostrar a los gijoneses que se puede gobernar con sosiego, con tranquilidad, sin enfrentar a unos contra otros, que ya demasiado de esa "mala política" se siembra desde el Gobierno de España.

En este nuestro gobierno, los concejales del Partido Popular están haciendo un trabajo intenso, con agendas interminables y reuniones con la sociedad civil gijonesa, aportando trabajo y sentido común a sus concejalías –soy testigo en primera persona–, y todos ellos se implican en sus áreas de gobierno para hacerlo de la mejor manera posible. No puede ser de otra manera.

Y digo gobierno Foro-PP porque es así, la alcaldesa es Carmen Moriyón y Foro tiene un mayor peso porque los gijoneses votaron con más generosidad a Foro que al PP. Esta situación no le quita efectividad al gobierno conjunto, pero sí merece la pena recordad una obviedad: sabemos que nuestra obligación es ganarnos la confianza mayoritaria de nuestros vecinos y, hoy por hoy, los votantes de ambos partidos son distintos. Competir es algo inherente a la democracia, se trata de intentar hacer ver a los gijoneses que nuestro partido es la mejor opción para la ciudad.

Y desde el Partido Popular lo hacemos, y lo seguiremos haciendo, con la máxima lealtad al gobierno de coalición, porque la lealtad es respaldar las decisiones que se toman conjuntamente, aunque no todo el mundo piense de la misma manera. Esto es justo lo que se hace en la Junta de Gobierno todas las semanas, y funciona.

En estos meses hubo casos en los que se han manifestado discrepancias y no pasa nada. Hablo, por ejemplo, de la propuesta de Foro de convertir el Solarón en un gran parque urbano, soterrar el tráfico en el muro o, ahora, en esta semana, el asunto ya cerrado de la sede del Mundial de Fútbol 2030. Habrá más, seguro, porque nuestros programas electorales eran distintos (aunque parecidos) y nuestra forma de ver las cosas, también.

Foro debe de asumir de una vez por todas que el PP puede opinar distinto, y que no pasa absolutamente nada, porque al final el Partido Popular y sus concejales serán leales al pacto de gobierno. Foro debe de olvidar la cultura de pensamiento único de la izquierda, porque el centroderecha político representa los valores de la libertad, del cuestionarse permanente lo que hacemos para mejorar, para aportar soluciones que enriquezcan las anteriores. Foro debe de darse cuenta de que su pacto con el Partido Popular no solo es bueno para los gijoneses, sino para ambos partidos, porque juntos demostramos que el centroderecha puede entenderse y trabajar lealmente desde la diferencia.

En definitiva, Foro debe aprender a respetar a un Partido Popular que tiene su propio posicionamiento político y opina de manera constructiva en las cuestiones que les preocupan a los gijoneses sin que ello cuestione el pacto de gobierno (faltaría más).

Si todo lo fiamos a la "Forovisión" de Gijón estaremos equivocándonos. Aprendamos de los errores y no confundamos sonrisas y buenas palabras con votos. Hay que recordar que Foro ya perdió la alcaldía en 2019 y ni ellos mismos se lo creían. Además, no sería la primera vez que los ciudadanos que han votado a uno de los partidos de gobierno dejan de verse representados en las decisiones de ese gobierno conjunto, y así perderemos todos.

Nadie puede pretender que el PP sea un partido sin voz y sin opinión, nadie puede pretender que el PP se diluya en el gobierno hasta el límite de la irrelevancia. Si eso ocurriese volvería a gobernar la izquierda en Gijón. Va a ser que no.

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