Veinte años para una historia de amor en verso: el "Aula de las Metáforas" cumple dos décadas

Un 29 de febrero, pero hace veinte años, nacía el "Aula de las Metáforas", una de las iniciativas culturales más innovadoras y singulares, que hoy sigue emocionando y enorgulleciendo a Grado y colocando el nombre del concejo en el pedestal que le ha proporcionado esta pasión por los versos. La iniciativa veía la luz en la capilla de los Dolores hace justo dos décadas "mientras la voz, el don y la guitarra de Amancio Prada ponían un nudo en las gargantas de aquel largo centenar de personas que asistieron", recordaba recientemente en un artículo en este periódico Fernando Beltrán, poeta, nombrador y fundador del aula.

Aunque no hay actos oficiales para celebrar el cumplimiento de estos veinte años, se ha dado una feliz coincidencia y será precisamente en otras aulas de Grado, en un instituto, donde Beltrán pasará la jornada de esta efeméride. El IES Ramón Areces tiene programado para hoy un acto de lectura poética y coloquio con los alumnos de primero y segundo de bachillerato y le ha invitado a participar. Se trata de una iniciativa organizada por las profesoras de Literatura del centro.

Aunque no esté relacionado con el aniversario del Aula de las Metáforas, ha coincido la fecha y "qué mejor manera" de estar presente en Grado, "leyendo poesía y explicando también a esos alumnos y alumnas esa historia tan guapa, esa historia de amor que ha sido el Aula", considera Beltrán, que viajó ayer en tren a Asturias para esta cita en el instituto y regresará tras disfrutar del encuentro a Madrid.

El "Aula de las Metáforas", que tiene una sede física en la Casa de Cultura de Grado, ha escrito una fructífera trayectoria a lo largo de estos veinte años, con encuentros, conferencias, ciclos, lecturas o exposiciones como "la dedicada a Albert Camus, llegada tras hacer escala en Tokio, París y Buenos Aires", tal y como rememoraba Beltrán hace escasas fechas al escribir sobre este aniversario.

Mencionó en esas líneas la gestión de Leopoldo Sánchez Torre, y el apoyo "de los infatigables" Manuel García Rubio y Covadonga Santianes a una iniciativa que ha supuesto muchas otras a lo largo de estos años logrando que "Grado y la poesía, la poesía y Grado" se hayan "hermanado cordial, sentimental, definitivamente, hasta sellar un pacto de mutuo intercambio", en palabras de Beltrán.

El "Aula de las Metáforas" ha auspiciado la presencia y posibilidad de disfrutar de la palabra, la música o el arte de diferentes personalidades de la cultura. "Un verdadero seísmo emocional que alcanzó sus cotas más altas e insospechadas con la presencia del mismísimo Leonard Cohen, y un no menos aclamado Joan Manuel Serrat, a los que se sumó el año pasado la experiencia que supuso la visita a Grado, como flamante Premio Aula de las Metáforas, del actor Pepe Sacristán, declamando poemas de Federico García Lorca en la mismísima plaza de Ponte, donde Federico instaló en 1932 su Barraca, y llegando a proclamar en público ‘sentirse’ desde ese día como un moscón más", rememoraba Beltrán en el citado artículo, publicado en LA NUEVA ESPAÑA el pasado 8 de febrero.

Fernando Beltrán recibió a inicios de 2023, en enero, el título de hijo adoptivo de Grado por su aportación al municipio. Además de la ceremonia de entrega a la que asistió emocionado en la capilla de los Dolores, los vecinos y responsables municipales quisieron homenajearle con otra iniciativa cargada de simbolismo: un banco en forma de libro abierto ubicado en la plaza Eliseo Nicolás, al lado de la Casa de Cultura, en el que figura inscrita "Ciudad de paso", una de las obras que forman parte del poemario "Hotel vivir", publicado por Beltrán en 2015.

El banco fue un broche a la dedicación, "lealtad, bondad y generosidad" del homenajeado, que aquel día señaló: "La poesía es un arte de supervivencia. No sé si salva el mundo, pero salva sus alas".