La ministra francesa de Exteriores, Michèle Alliot-Marie, exigió ayer al presidente saliente de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, que retire sus tropas de las calles y deje el poder a su oponente en los pasados comicios, Alassane Ouattara.
París respondió así a la petición de Gbagbo de que la ONU y Francia retiren sus tropas del país y le dijo que no es un interlocutor válido para la comunidad internacional. «En las próximas horas debe elegir entre pasar a la historia como un demócrata o alguien que ordenó disparar contra marfileños», dijo la ministra, quien le advirtió de que los militares galos responderán a cualquier provocación.
El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki Moon, aseguró que las fuerzas de paz en Costa de Marfil (UNOCI) permanecerán en el territorio. El Gobierno estadounidense ha ordenado la evacuación de todo el personal no esencial de la Embajada en Costa de Marfil debido al riesgo de violencia.
La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, ha asegurado que existen pruebas de violaciones «masivas» de los derechos humanos en Costa de Marfil.
