El congreso Cambio de Clima reunió a arquitectos de primer nivel, entre ellos dos premios "Pritzker" (el Nobel de Arquitectura) y el Chairman de arquitectura de Harvard. Se celebró en Pamplona el 29 y 30 de junio y fueron dos jornadas muy ricas en las que se recogieron los pensamientos de arquitectos de fama internacional. Lo más actual también circuló, como la desilusión general de los conferenciantes con el "Brexit". Quedó claro desde la introducción que hizo Luis Fernández-Galiano (con Patxi Mangado, autor del Museo de Bellas Artes de Oviedo), parte fundamental de la organización, que el asunto que congregaba el Cambio de Clima también se refiere al cambio de clima social y de las nuevas políticas. Ésta es una selección de las ideas más electrizantes extraídas de las conferencias de nueve arquitectos internacionales. Ideas que construyen.
IDEAS
REM KOOLHAS
“Pritzker”, hizo un discurso político proeuropeo con algunas críticas a nuestro modelo de sociedad
Estableció dos tendencias de Europa, la del Sur y la del Norte. Habló también de las relaciones con Estados Unidos y de cómo la economía afecta a la ciudad. Definió nuestra sociedad como la del confort, la seguridad y la sostenibilidad. Proyectó fotos de un triste Londres de los años sesenta y del Berlín en la Guerra Fría. Otras con políticos internacionales (hasta Felipe González) y reuniones por el clima. “Europa está muerta”, proclamó, mostrando el plano de Herodoto cuando era todo el mundo. Ahora todos los discursos son “derechos humanos, confort, libertad”, pero la verdad es que Europa es una locura burocrática. Aunque ¡podemos ver sus inversiones en cada calle de España!, con tantas leyes es muy difícil ser empresario, no se puede innovar ni experimentar. Todo es, pues, una declaración de interdependencia.
Al centrar el tema explicó que la superficie de las ciudades supone el 2% del planeta, que recibe el 50% de la población, consume el 75% de la energía y es responsable del 80% de las emisiones de CO2. La concentración poblacional desertiza zonas. Hay muchas ciudades rusas abandonadas.
Respeto a Estados Unidos destacó un concepto muy importante: la planeidad del terreno es algo muy valioso para la agricultura. Por tanto, unos nuevos vectores apuntarán hacia esa franja central americana plana. También fue muy interesante su reflexión sobre el tema de la escala, cómo van creciendo los tractores, los televisores y las grandes naves contenedoras de productos que se venden por internet... pero se gestionan con poca gente y por tanto no se crea ciudad.
PIERRE DE MEURON
También premio “Pritzker”, explicó el pequeño proyecto de un museo
El también premio “Pritzker” se centró en un pequeño museo en la alsaciana Colmar, una ciudad medieval y que había tapado el riachuelo que pasaba por el centro, perdiéndose esta cualidad acuosa. Se recuperó este río y se introduce una nueva pieza construida simétrica a la iglesia. Explicó, con todo detalle, el proyecto: acabados de ladrillos, salas, obras... y remarcó la relación entre la obra de arte y el visitante, la función pedagógica y también cómo se debían de encontrar el urbanismo, la arquitectura y la museografía.
JEAN PHILIPPE VASSAL
La firma Lacatton-Vassal ha dignificado el invernadero, incorporando su luz a la arquitectura social
El arquitecto francés mostró sus primeras viviendas y barrio en Burdeos, el Palacio de Tokio, la Universidad de Nantes y el centro artístico de Dunkerque y trató cuestiones como el presupuesto admisible, la sostenibilidad, la ciudad inteligente… para añadir que hay que ser elegantes: la poesía es esencial, la amabilidad, la belleza y la generosidad. Habló de casas autoconstruidas, como hacen los africanos. Habitar es libertad, confort, generosidad de espacio, placer y lujo para todos. Fluidez, movilidad, sistemas constructivos estructurales. Citó a Emilio Ambasz: “Si la naturaleza fuera perfecta no tendríamos que hacer casas”. A veces la propuesta es no construir.
LOUISA HUTTON
La arquitecta inglesa de Sauerbruch Hutton disertó sobre el color, la sostenibilidad y la implicación de los usuarios
Habló mucho del color, de la estética de la energía, del diseño pasivo. Sus ideas se mostraban con edificios suyos como el GSW de Berlín: “Lo que hacemos con el edificio lo hacemos con la ciudad.” Destacó la importancia en la eficiencia de la implicación de los usuarios mientras explicaba el UBA de Dessau, un edificio para el organismo de la energía alemán. “La sostenibilidad no es sólo tradición”, dijo, ya que el famoso edificio de la Bauhaus, también en esa ciudad alemana, está totalmente acristalado con finos vidrios pero es más sostenible por la cantidad de visitas que recibe la ciudad gracias a él.
Explicó el KKW de Stuttgart, que responde a la orientación solar, también el BSU de Hamburgo, el Munich RE -del que habló de la policromía dinámica, ya que los estores son de colores y dependen de los usuarios- el Brandhorst Museum, donde se producen irisaciones muy bonitas, y una iglesia.
DIETMAR EBERLE
La firma Baumschlager-Eberle es orden centroeuropeo
Dietmar Eberle constataba que pasamos de una sociedad industrial a una de servicios donde crece mucho la esperanza de vida. Ahí van sus rotundas afirmaciones e inquietantes preguntas:
1) ¿Qué avances del XX deberán desarrollarse en el XXI?, ¿cuál es la densidad correcta? 2) El primer medio de movilidad será el caminar. 3) Hay en España un montón de desarrollos urbanísticos… ¿Seremos capaces de mantener lo que hemos construido? 4) Cada veinte años la necesidad de construir cambia, esto es un desastre ecológico. 5) La sostenibilidad está incluida en la Constitución Suiza como una obligación. 6) No seas hijo de arquitecto porque heredarás sus deudas. 7) Cuanto más específica es una función menos dura. 8) Lo importante es “cómo poner las cosas juntas”.
Una cliente les encarga cada año una pequeña pieza, porque dice que la buena arquitectura incrementa su calidad de vida.
KJETIL THORSEN
Cofundador de Snøhetta, estudio autor de la Ópera de Oslo y de la Biblioteca de Alejandría
Este arquitecto noruego, que deleitó con una conferencia muy social y de implicación pública, se basó en lo que llama “experiencia colaborativa”. En ella debe de haber una idea que desarrolla el carácter distintivo, la singularidad que haga el proyecto diferente a lo realizado anteriormente. También simplificación, densidad de creatividad. En el proceso el cliente puede ver y participar en cómo se desarrollan las distintas etapas. Ha de ser singular en lo plural, siempre dentro de la sociedad. “Nunca digas ‘no se puede’ porque ya lo intentaste, cada intento es diferente”. Mostró su Ópera de Oslo y la Biblioteca de Alejandría -esa que los estudiantes rodearon con sus brazos en la Primavera Árabe para protegerla- tanto el mirador tan publicado y como otro más modesto.
Hay que ser generoso: espacios sin llaves. Estos pequeños pabellones son gratis pero la gente deja dinero. Duermen, hacen hogueras..., socializan. Comer-Amar-Rezar. “En arquitectura, primero, hay que entender lo que hacen los otros”, es importante “la reinvención continua” y “evitar hábitos, no dormirnos”.
IÑAKI ÁBALOS
Chairman de Harvard y socio de Renata Sentkiewicz, sedujo con sus proyectos y con “el proyecto del proyecto”
No se tiene todos los días la oportunidad de oír al Chairman de arquitectura de Harvard (cargo que desempeñaron por ejemplo Sert y Moneo). Debemos dar respuesta estética al cambio climático, pero hay que cambiar del formalismo a otros aspectos como la termodinámica con una nueva belleza. Hay que experimentar, explorar, disfrutar. Hay que hacer “el proyecto del proyecto”. “Tuvimos hasta ahora un exceso icónico” (se refería a la arquitectura espectacular) que tiene relación en pintura con la tradición egocéntrica del autorretrato, “pero ahora debemos movernos en la naturaleza muerta, la relación entre elementos autónomos, los espacios que los interrelacionan”... Citó una definición del escultor Juan Muñoz: “El arte es expandir los límites de la experiencia”.
Mostró de sus obras la incineradora de Barcelona (con Herreros), un parque de Medellín, proyectos en Doha, Zhuai y China y la estación de AVE de Logroño, donde Ábalos+Sentkiewicz prefirió primar el cinturón verde sobre la arquitectura icónica.
WINY MAAS
MVRDV, arquitectos holandeses siempre en la cresta
No paró de moverse ni de hablar. Se posicionó contra el “Nexit” holandés, necesitamos crecer siempre económicamente, nada de Protocolo de Tokio. ¡Actividad! Liderazgo. Tenemos demasiadas leyes y la complejidad es paralizante. Cada país tiene su receta de casa pasiva, necesitamos un esperanto, una lengua igual para todos. Habló de proyectos en Taiwán, de recuperación sobre una autopista abandonada, de escaleras con andamios en Rotterdam a los que se sube para tener desde allí una nueva visión, y de Phuket, Tailandia, donde hacen que entre el agua dentro de la ciudad. Provocó con su cansancio de lo verde: “La mayoría de los edificios verdes son feos con locura”. “¡El rascacielos es tan individual!, no conecta, sino que aísla de la ciudad, pero tiene inmensas posibilidades de variación formal”. Hay que encajar las cosas, metiendo en un contenedor la casa que quiere cada uno, hablar y negociar.
¿Y lo próximo? Un material que se comprime y las habitaciones se pliegan cuando no se usan. ¿Y lo próximo? Una alfombra mágica que al tocarla transmite a otra tus movimientos… En vez de ciencia-ficción prefiere ciencia y ficción. Aplausos.
BJARKE INGELS
B.I.G., El nuevo enfant terrible de la arquitectura clama: “¡La empatía es tu superpoder!”
El arquitecto danés Bjarke Ingels dio una conferencia de ver obras. Empezó por su estudio de Nueva York: nos gustan los espacios fabriles porque están diseñados para otra escala y porque son flexibles. Habló de las nubes, de las medinas árabes, del festival del Burning Man, del Land Art. A mayores problemas hay que ser más activo. De Bernard Rudetsky y la arquitectura sin arquitectos.
Enseñó su proyecto para Google, otro en Taiwán, un museo en Montpellier, una pista deportiva en su Instituto, una autopista en Vancouver que se cambia buscando lo verde con un rascacielos, mostró un edificio de viviendas: la casa 8, también el museo marítimo danés esta vez muy respetuoso con el castillo de Kronborg en el Shakespeariano Elsinore, y el Serpentine de Londres, que se encarga cada año al arquitecto más actual y se demuele de nuevo, y que él hizo este año a partir de un módulo sencillo que al repetirse crea un espacio interior.
Disertó sobre las dos posturas: Robert Moses/ Jane Jacobs, el constructor y la activista. Poner siempre los problemas a favor como en el proyecto que se prepara para evitar las inundaciones en Nueva York: bancos que aguanten, plantas que aguanten… Resiliencia. Dedicó bastante tiempo a la incineradora de Copenhague, donde un problema, la gran chimenea, acaba convirtiéndose en un activo, ya que propone montar una pista de esquí.
