Langreo, L. M. D.

El langreano Juan Carlos Beiro fue asesinado por ETA cuando tenía 32 años, en las cercanías de la localidad navarra de Leiza. La banda terrorista utilizó una bomba trampa oculta tras una pancarta. En la misma acción terrorista resultaron heridos otros cuatro miembros de la Benemérita.

El atentado se produjo sobre las 12:50 horas del 24 de septiembre de 2002, en la carretera NA-1320, en el puerto de Urto, a escasos cien metros de la frontera con la provincia de Guipúzcoa. La patrulla a la que pertenecía Beiro acudió a la zona para retirar una pancarta situada junto a un muro. Según los testigos, la pancarta rezaba «Gora ETA. Guardia Civil muere aquí». El cabo y el sargento se bajaron del vehículo para observar la pancarta. En ese momento, la bomba fue accionada a distancia por los terroristas. El artefacto contenía unos 15 kilos de explosivo.

Al día siguiente, más de 8.000 langreanos salieron a la calle para condenar el atentado. El 25 de septiembre se celebró el funeral, que abarrotó el entorno de la iglesia de Santiago Apóstol de Sama. Al sepelio acudieron, entre otras personalidades, el por entonces presidente del Gobierno, José María Aznar.