La apertura de la segunda calzada del tramo de la Autovía Oviedo-La Espina (A-63) entre Casazorrina y el viaducto de El Regueirón, en el concejo de Salas, se producirá este próximo lunes 7 de noviembre. Desde el 19 de octubre, todo el tramo desde Casazorrina a La Espina se mantenía cerrado para finalizar las obras, por lo que este anuncio supone que se reabra el trayecto al completo, algo esperado en la zona ya que durante estas semanas los conductores han tenido que volver a transitar por la antigua nacional N-634 entre Salas y La Espina.
La adaptación de esta segunda calzada, en los primeros 4,9 kilómetros de los 12 kilómetros que hay hasta La Espina, contó con un presupuesto de 8,17 millones de euros. También incluyó la adecuación de la calzada existente, en la que se realizó el borrado de las marcas viales amarillas y el pintado de las nuevas, y se colocó la señalización vertical y los sistemas de contención.
La reapertura de la carretera a La Espina, con la incorporación de ese nuevo tramo de autovía, supondrá un pequeño alivio para los conductores habituales de la zona, que en el último año han tenido que sufrir el cierre de Casazorrina a La Espina desde julio de 2021 a julio de 2022 por la reconstrucción del puente de La Barrosa. Transportes marcó el horizonte para la puesta en servicio de la autovía hasta Salas a finales del ejercicio 2023.
En los Presupuestos Generales del Estado presentados a principios de octubre se recogía una partida de 11,7 millones de euros para la continuidad de las obras. En concreto, se destinan 11 millones de euros para el tramo de 7,3 kilómetros que va de Cornellana a Salas y otra partida de 742.240 euros para la segunda calzada de El Regueirón a La Espina. Se trata de un dinero que, según entienden los alcaldes de la zona, se destinará a la actualización del proyecto y a iniciar el proceso de contratación.
