La IGP Faba Asturiana crece en hectáreas plantadas y en producción certificada

Hace seis años que Miguel Rodríguez y su mujer cambiaron sus profesiones por la faba y ayer recibieron el reconocimiento del Consejo Regulador de la Faba Asturiana por ser los productores que mayor cantidad de faba certificaron con su propia marca "Finca La Villa", que siembran en Villavaler (Pravia). "Yo vengo de la construcción y mi mujer de la hostelería y un día decidimos dejarlo para dedicarnos a la faba y hoy no volveríamos a como estábamos antes, ganamos en calidad de vida", asegura Rodríguez, que produce unas tres toneladas de faba y dos de verdina. Este reconocimiento fue compartido con el joven salense Ignacio Garrido Álvarez, que comercializa desde 2020 bajo su marca propia "Fabas de Llazán". Viene de familia ganadera y decidieron diversificar apostando por la faba gracias al consejo de un amigo. En 2019 decidió incorporarse a la ganadería familiar y profesionalizar su apuesta por la legumbre entrando en la Indicación Geográfica Protegida (IGP) y creando su marca.

Ellos fueron dos de los premiados en la gala de la Faba Asturiana IGP celebrada ayer en Navia, donde se reconoció el trabajo realizado por productores y comercializadores durante la campaña 2020-2021. De nuevo, el presidente de la IGP Sergio Suárez López, de Coaña, volvió a ser el productor con la mayor cantidad de faba asturiana y de verdina de Asturias marca de garantía vendida a empresas envasadoras para que estas procedan a su certificación. En su caso lleva 20 años dedicado al mundo de la faba pasando de cultivar una hectárea y media a las 50 hectáreas actuales y consiguiendo crear un centro de selección.

El presidente de la IGP destacó los buenos datos que están recogiendo en las últimas cosechas. "Desde 2017-2018 que fue el año récord de certificación en faba, vemos que se está disparando y el objetivo del consejo es certificar toda la producción", recalca. La campaña 2020-2021, que es la que se cerró en marzo de 2022, contó con 123.936 kilos de faba asturiana certificada y 17.894 de verdina marca de garantía. "Es una de las mejores cifras alcanzadas desde los inicios de las marcas y en la campaña de 2022-2023 se han sembrado 30 hectáreas más", especifican desde el Consejo Regulador.

Una superficie de plantación que crece con 218 hectáreas sembradas, aunque disminuyen los productores, que se quedan en 135, indicativo de la profesionalización del sector. "Vemos que hay más incorporaciones de gente joven que viene para quedarse, que ven que la faba no es un complemento sino la actividad principal en las explotaciones y lo que buscamos es la profesionalización del sector", añade Suárez.

Entre los reconocimientos entregados también se premió a la agricultora Cecilia Fernández, de Gozón, por la mayor producción certificada de verdina bajo marca propia "Casa Bartuelo". Asimismo, hubo galardones para el sector envasador donde se premió a la empresa Legumbres La Tierrina Vaqueira, de Valdés, por la mayor comercialización certificada en grano de faba y verdina. Su gerente, Víctor Manuel Berdasco, reconoce que la faba "es un producto considerado gourmet, de calidad y la gente lo busca para momentos determinados de reunión y celebración, funciona muy bien, es el producto más rentable que tenemos en Asturias".

Otras empresas galardonadas fueron Quesos del Principado de Asturias, por la comercialización de faba con embutido; Productos Noreñenses, por la venta de la fabada elaborada; y en esta misma categoría para las verdinas fue la empresa Conservas Laurel.

Por último, el Consejo Regulador dio el premio al mejor colaborador al funcionario del Principado Vidal Francisco Álvarez "por su implicación y apoyo durante los últimos años con la IGP Faba Asturiana y con la Marca de Garantía Verdina de Asturias".

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