Las chimeneas de la central térmica del Narcea se resisten a su demolición

Las voladuras se repetirán este mediodía para tirar al suelo las dos estructuras: "Es un día triste"

La central térmica del Narcea, situada en Soto de la Barca (Tineo), opuso ayer resistencia al primer intento de su demolición con explosivos. Estaba previsto ver caer dos de sus chimeneas y dos silos; sin embargo, tras la detonación solo se vinieron abajo los almacenes destinados al depósito de cenizas y escoria. Según apuntaron fuentes cercanas a Naturgy, no se esperaba que las estructuras fueran tan robustas como para soportar la carga explosiva utilizada.

Ver caer las chimeneas de los grupos I y II de la central térmica del Narcea había despertado expectación entre los vecinos de la zona, muchos de ellos vinculados emocionalmente a esa instalación por ser o haber sido su lugar de trabajo durante años o el de sus familiares. De este modo, a partir de la una de la tarde, a los alrededores de la central iban llegando curiosos con la intención de presenciar el derrumbe del gigante térmico. Y coincidían en repetir que el de ayer era “un día triste” para el concejo de Tineo y toda la comarca suroccidental.

Público asistente a la demolición.

Público asistente a la demolición. / D. Álvarez

La sorpresa fue mayúscula cuando a las tres y media de la tarde, y después de sonar varios avisos en forma de sirena, llegó la detonación y solo se vieron caer los silos. Tras unos segundos de espera e incertidumbre, en el solar de la térmica comenzó a verse movimiento de operarios, lo que indicaba que algo no había salido según lo planeado. Entre el público, algunos se alegraban de ver que “la central no ponga fácil su desaparición”.

Las chimeneas de la central térmica del Narcea se resisten a su demolición

Demelsa Álvarez

No obstante, hoy se volverá a repetir la operación sobre las 12.00 horas. Naturgy, propietaria de la central térmica, informó que después de evaluar la situación con los técnicos de las empresas encargadas de realizar el desmantelamiento y las voladuras, “las chimeneas presentan la estabilidad suficiente” para poder posponer su demolición al día de hoy.

El inicio de las demoliciones, que supone la desaparición de unas estructuras que marcaron la vida de la zona durante las últimas seis décadas, se está viviendo por parte de los vecinos como el cierre de una era de la etapa industrial de la comarca. “Este día es triste para Tineo, es una pena que todo esto se vaya al garete después de ver los millones que aquí se invirtieron”, apunta Luis Ángel Menéndez, de Soto de la Barca, que fue trabajador de la térmica. Un sentir que se repetía en el resto de vecinos. “Esta es la imagen que representa el fin, pero desde hace años se nota en la zona el cierre de las minas y de la térmica. Era muy importante y ahora nos quedamos sin nada”, añade.

Carlos Camporro y Luis Ángel Menéndez, ayer, momentos antes de la voladura.

Carlos Camporro y Luis Ángel Menéndez, ayer, momentos antes de la voladura. / D. Álvarez

La alcaldesa de Tineo, Montserrat Fernández, comparte la visión de que ver caer las estructuras icónicas de la central: “Significa el fin de una era” y añade que también representa “el abandono, la dejadez y la soledad del concejo de Tineo en la reivindicación de que haya un futuro para la zona de Soto de la Barca”. La regidora insta a la compañía Naturgy que apoye al Ayuntamiento en la inversión para recuperar el poblado creado para los trabajadores, ahora abandonado, y también espera apoyo para transformar el solar que ocupó la industria en un espacio que tenga un futuro industrial a corto plazo.

“A día de hoy no tenemos alternativas de Naturgy y es tremendo que al final que esta empresa se vaya de rositas de Tineo, sin dejar una actividad industrial y eso es lo que reivindicamos”, insistió la alcaldesa. A este tema hizo referencia el viceconsejero de Industria y Transición Justa, Isaac Pola, ayer, antes de una reunión con responsables del Ministerio de Hacienda y de la Comisión Europea para analizar el desarrollo del Fondo de Transición Justa en Asturias, donde recordó que Iberdrola y Naturgy “deben asumir sus compromisos con el territorio y apoyar el desarrollo alternativo de Langreo y de Tineo” tras el cierre de sus centrales térmicas, y "compensar" de esta manera la actividad económica y el empleo perdido en ambas comarcas.

Las demoliciones en la central tinetense continuarán la semana que viene con la voladura de la torre de refrigeración, la parte más representativa e icónica. De hecho, había una petición por parte del Ayuntamiento por mantener esta infraestructura, ya que existía una propuesta privada para darle un uso lúdico. “Se había llegado al compromiso de que se iba a mantener, en todo caso tirarlo en último lugar, y lo que vemos es que lo van a tirar prácticamente al principio, es verdad que había que hacer una inversión para actualizar la construcción, pero no iba a costar mucho más que su derribo”, explica con decepción la alcaldesa tinetense.