Los impuestos por el CO2 y el precio de los alimentos

China y Estados Unidos se desmarcan de los acuerdos sobre el clima

Los impuestos por el CO2 y el precio de los alimentos

Los impuestos por el CO2 y el precio de los alimentos / LNE

Ángel Jiménez Lacave

Ángel Jiménez Lacave

Al Gore, exvicepresidente de Estados Unidos, fue galardonado en 2007 con un Óscar por un documental sobre el calentamiento del planeta y sus efectos devastadores para la humanidad. Sostenía que quedaban diez años para reducir drásticamente las emisiones de dióxido de carbono (CO2) o el mundo llegaría a un punto sin retorno. Según sus predicciones, y las de su grupo, el hielo ártico desaparecería en cinco años, las nieves del Kilimanjaro, antes del 2020 y las islas Maldivas quedarían sumergidas por el mar para esas fechas.

Han transcurrido más de 15 años desde que se vaticinó tal cataclismo; sin embargo, el deshielo del Ártico, tras más de diez años de descenso, se está recuperando (informe del grupo CLINTEL). Por otra parte, la extensión del hielo de la Antártida ha aumentado en 5.305 Km2 entre 2009 y el 2019 ( datos de "El Debate"), las nieves del Kilimanjaro siguen presentes y las Maldivas, al igual que otras islas de la Micronesia, se mantienen sobre el nivel del mar.

Es evidente que el vaticinio de una devastadora catástrofe climática no se ha cumplido, y, por lo tanto, la teoría del calentamiento global extremo ha perdido credibilidad. Por otra parte, un número creciente de científicos independientes han demostrando que el clima en la Tierra ha atravesado fases frías y cálidas de forma cíclica. De tal manera que en la actualidad se acepta más el término "cambio climático" que "calentamiento global". Y aunque es cierto que estamos en una fase cálida, varios astrofísicos anuncian que está llegando a su fin.

En cuanto a la relación del CO2 con el clima, Samuel Furari (presidente del Colegio Europeo de Ingenieros) señaló, en un artículo publicado en el "European Scientist" el 6 de octubre de 2023, que diversas investigaciones difundidas en revistas de prestigio, como "Nature", indican que no cabe aceptar que el CO2 sea el factor determinante del aumento de la temperatura. Señala en su artículo que durante las anteriores épocas frías, los niveles de CO2 alcanzaron, en ocasiones, niveles más altos que en la actualidad, lo que contradice que el CO2 sea el causante del calentamiento. Además, la Tierra ha pasado por múltiples periodos cálidos y fríos antes de la era industrial, lo cuál indica que las emisiones de CO2 industrial no son la causa de que en el momento actual estemos en una fase cálida.

Si el CO2 no es el causante del cambio climático, ¿qué es lo que influye en dicho cambio? En el articulo antes mencionado, también se hace una revisión de los posibles factores que influyen en el clima, entre otros se señalan: la actividad solar (variación del número manchas solares), la alineación entre los planetas Júpiter, Saturno, Venus y el sol; la actividad volcánica marina y aérea, etc. Esta teoría la confirman, también, 1.609 científicos, incluyendo dos premios Nobel, según la "World Climate Declaration".

Si todo lo anterior es cierto, ¿cómo se explica que se siga con el impuesto por emitir del CO2? Caben tres respuestas. La primera podría ser porque la Comisión Europea y los países dependientes se han comprometido a seguir las instrucciones de la ONU y del grupo IPCC (Intergovermmental Panel on Climate Change), a pesar de que no se han cumplido sus predicciones. En segundo lugar podría explicarse por razones geopolíticas: para no depender del petróleo, pero en ese caso no se explicaría la presión para eliminar otras fuentes de energía que no emiten CO2, como la hidráulica (demolición de presas) y la nuclear (desde Felipe González). La tercera se explicaría por los intereses de las elites financieras (plutócratas, promotores de la agenda 2030, etc.); pero esta teoría, llamada conspiratoria, para poder aceptarla se precisa estar más informado (ver, Carlos F. Astiz, en "Resistencia").

Lomborg Bjorn analiza en su libro "La gran mentira" la caída del Producto Interior Bruto (PIB) en la UE como consecuencia de los impuestos por las emisiones de CO2. En España, según Juan Antonio de Castro, la caída del PIB supone un 4,9%. Mientras, China, la India y EE UU no siguen los acuerdos sobre el clima. En un libro publicado por Furari titulado "Inseguridad Energética: la destrucción organizada de la competitividad de la Unión Europea" se explica en detalle esta deriva energética, el retroceso económico de España y, el aumento del precio de los alimentos.

En cuanto al efecto invernadero, regulador del clima en nuestro planeta, siempre conviene tener presente que el principal gas de efecto invernadero en la Tierra es el vapor de agua. La participación de los otros gases especialmente el CO2 en dicho efecto es mínima, según el grupo de científicos antes mencionados. Sobre los efectos en la salud de otros gases, aparte del CO2 (un gas necesario para la vida) y el afán de eliminar el ganado por emitir metano, como los seres humanos (un gas necesario para la vida), merece un articulo aparte.

Y, por último, conviene resaltar que se está incentivando instalar placas solares y aerogeneradores a sabiendas de que estas instalaciones no pueden asegurar la respuesta en potencia (no siempre pueden funcionar) que el sistema necesita para garantizar el suministro de luz en todo momento. Como bien dijo Pedro Fango Valle, exdecano del Colegio de Ingenieros de Asturias: "No se puede suprimir una fuente de energía antes de contar con un sustituto". La reducción del precio de la luz que hubo en el último mes ha sido posible gracias fundamentalmente al abaratamiento del coste del gas natural, que es el que marca el precio de la electricidad.

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