El importante papel del turismo rural en el éxito de visitantes a Asturias

Asturias está viviendo en estos momentos un gran éxito turístico que quedó evidenciado en Fitur con el gran número de visitantes al stand del Principado de Asturias y el interés general de nuestra región como destino turístico. Este interés se concreta en los viajeros que nos visitaron en 2023, cuando alcanzamos los mejores resultados de nuestra historia turística. Es una buena muestra de que las cosas no se están haciendo mal por parte de nuestro gobierno regional y los municipales.

El nuevo equipo de Gobierno del Principado, encabezado por la vicepresidenta y consejera de Presidencia, Reto Demográfico, Igualdad y Turismo, Gimena Llamedo, junto a la viceconsejera de Turismo, Lara Martínez, han multiplicado su presencia en Fitur, una de las mayores ferias de turismo del mundo que facilitó que el stand de nuestra región tuviera una gran acogida por parte de miles de visitantes. Y es que Asturias está de moda.

Dadas las características de Asturias y el atractivo de sus recursos naturales y la dispersión y tamaño de sus núcleos de población, una parte importante de ese éxito se lo debemos al turismo rural, que la Organización Mundial del Turismo la define como "un tipo de actividad turística en el que la experiencia del visitante está relacionada con un amplio espectro de productos vinculados por lo general con las actividades de naturaleza, la agricultura, las formas de vida y las culturas rurales, la pesca con caña y la visita a lugares de interés".

Es decir, no incluye solo alojamiento, sino todos los servicios como restauración, experiencias, actividades al aire libre, etcétera. Y en Asturias una parte muy importante de los negocios turísticos se desarrollan en el ámbito rural. Una de nuestras características que genera más atractivo es, precisamente, nuestro paisaje y nuestra naturaleza y hemos preservado estos espacios con infraestructuras turísticas integradas perfectamente con el medio ambiente y totalmente sostenibles. El Turismo en Asturias es un turismo cuyo escenario principal es lo rural, muy disperso y atomizado que requiere asociaciones con estructura que llegue con facilidad a todos los rincones de Asturias

Por eso, en Otea hemos establecido la categoría Otea rural, en la que se incluyen, además de los distintos tipos de alojamiento: hotel, casa, apartamento, albergue, camping..., a los restaurantes, los bares-tienda, los bares rurales de los pueblos, etcétera, que con la necesaria reconversión de la economía agrícola y ganadera y el apoyo administrativo a nuevas alternativas rentables, logren un entorno rural repoblado y enriquecedor para todos

Son muchos y despliegan un trabajo crucial para la conexión del territorio y evitar la despoblación. Muchas estrellas Michelin en Asturias están en ámbitos rurales; muchos establecimientos del Club de Guisanderas se ubican en pueblos y espacios rurales, hay decenas de restaurantes rurales que presentan una oferta única, como recoge cada semana LA NUEVA ESPAÑA en su serie "Un camino entre pucheros".

Desde las administraciones deben de hacer una reflexión necesaria. No es lo mismo gestionar un hotel, un restaurante u otro establecimiento en una ciudad que en la zona rural.

Las administraciones deben facilitar los mismos servicios como mejoras en las infraestructuras como son las comunicaciones, agua, saneamiento o facilitar e impulsar coberturas de internet competitivas, telefonía o televisión. Las empresas suministradoras, proveedoras o los mismos trabajadores lo tienen mucho más difícil por las comunicaciones por carreteras, las deficientes conexiones por internet y uso de las redes sociales que evidentemente en la zona rural no van con la misma fluidez que en una ciudad potentes redes de fibra ópticas y con 5G.

Este reto o dificultad debe de tener una compensación a nivel fiscal. Tenemos que hacer atractivo invertir y mantenerse en las zonas rurales y acabar con la competencia ilegal poniendo más medios efectivos.

En Asturias, en el año 2023, han cerrado cerca de 300 empresas de hostelería y turismo y el análisis de Otea es que la mayor parte de ellos proceden de la zona rural. Si no queremos que al turismo le pase lo que le está ocurriendo al campo asturiano y español, tan de actualidad estos días, atenazados por la presión normativa que cercena su futuro, debemos de actuar ahora, cuando todavía estamos a tiempo.

Hoy vemos como en los prados junto a nuestras casas rurales cada día tienen menos ganado, como disminuyen los terrenos cultivados, hay menos familias en nuestros pueblos, en definitiva, menos actividad, que fue lo que nos hizo únicos hace 40 años cuando el expresidente Pedro de Silva hablaba y potenciaba el turismo rural.

Y, como digo, estamos a tiempo porque el año 2024, con la mejora definitiva de la conexión ferroviaria con Madrid a través de la variante de Pajares, al incorporarse los trenes Avlo y aumentar las frecuencias, estamos en disposición de mejorar aún más los resultados de 2023 en todo el ámbito del turismo. A esta situación se suma, sin duda, el título de Capital Española de la Gastronomía 2024 obtenido por Oviedo, que solo por la repercusión mediática y la promoción de Asturias que provoca, nos sitúa en un escenario de optimismo.

Desde Otea Rural como representante empresarial del sector turístico, aseguro que nuestras empresas rurales, junto al resto del sector, están perfectamente preparadas para responder a todos nuestros turistas y visitantes. Sí todas las empresas asturianas estamos orgullosos de nuestro territorio podemos decir en el Turismo Rural es nuestra joya de la Corona que hará más grande a Asturias. Cuando el sector vende felicidad, el turismo Rural hace a la gente más feliz en Asturias.

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