Arriondas (Parres),

Bárbara MORÁN

Fracaso absoluto. Así calificaron ayer los representantes de los sindicatos el resultado del encuentro que mantuvieron en la sede de la Consejería de Salud, en Oviedo, con los responsables sanitarios del Gobierno del Principado para buscar una salida al conflicto del Hospital del Oriente. Los sindicatos, que se habían ofrecido como intermediarios en el conflicto, reconocieron, después de tres horas de reunión, que «todo sigue igual que estaba», y que, de momento, no hay solución para el conflicto sanitario. El Ejecutivo de Vicente Álvarez Areces se niega a hablar de la plena integración del hospital en el Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) y del reconocimiento de la carrera y desarrollo profesional a la plantilla.

Los sindicatos sanitarios SIMPA (Sindicato Médico del Principado de Asturias), SATSE (Sindicato de Enfermería), USAE (Unión Sindical y Auxiliares de Enfermería), SICEPA (Sindicato Independiente de Celadores y Personal no Sanitario del Principado de Asturias), UGT y CC OO se reunieron en la tarde de ayer con el consejero de Salud, Ramón Quirós, y Arcadio Fernández, director general de Planificación. «Ha sido un fracaso y los resultados son malos. No hemos logrado avanzar absolutamente nada. Nos han recibido con el no sistemático de siempre y no han querido ni hablar de carrera de desarrollo profesional, de la ampliación de la plantilla ni de la integración del Hospital de Arriondas en el Sespa. Ninguno de estos puntos y de las demás reivindicaciones merecieron ni tan siquiera el estudio de los responsables sanitarios con los que hoy (por ayer) nos reunimos», aseguró al término de la reunión, el portavoz del SIMPA, José Luis Sánchez Barbero.

Por el momento el Principado sigue sin querer hablar de la prometida integración del Hospital de Arriondas en el Sespa. «Sólo conceden el paso a fundación pública. Nada de integración. Tampoco nos han emplazado para otra reunión y la plantilla joven e ilusionada que comenzó con este hospital empieza a quedarse sin aliento. Ahora transmitiremos al comité de empresa del hospital el fracaso de nuestro primer intento de negociar y de lograr que su trabajo tenga el mismo reconocimiento que el que tiene el personal sanitario en el Sespa», concluyó, Barbero

El fracaso de ayer hará, salvo monumental sorpresa, que continúen las huelgas intermitentes de la plantilla, e impedirá que desaparezcan las listas de espera, consecuencia de las jornadas de paro. Los trabajadores han reconocido en las últimas semanas que comienzan a estar demasiado cansados y desilusionados. Señalaron que el Grande Covián va camino de convertirse en un hospital sin atractivo alguno para los profesionales, pese a que, paradójicamente, encabeza las encuestas de satisfacción de los usuarios.