Llanes, María TORAÑO

«La ordenanza contra el consumo de alcohol en la calle está prácticamente redactada», confirmó ayer el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Llanes, José Manuel Herrero, durante la presentación de la sede de la delegación de árbitros del Oriente de Asturias, a la que acudió como edil de Deportes. La intención del Consistorio es llevar la nueva normativa al próximo pleno que, si no se convoca ninguno extraordinario en febrero, se celebrará en el mes marzo.

«Bajo ningún concepto se va a prohibir beber en romerías y verbenas», matizó Herrero, quien añadió que de lo que se tratará principalmente será de «garantizar el descanso en aquellas zonas residenciales más afectadas», como sucede en el barrio de El Cuetu, uno de los puntos habituales de reunión de los jóvenes que se juntan para beber los fines de semana. «Evidentemente toda ordenanza contempla las sanciones y se aplicarán siempre que se altere la convivencia con los vecinos», agregó.

Para el concejal es tan importante actuar contra el consumo abusivo en la vía pública como incentivar labores de prevención. «Apoyaremos campañas de sensibilización destinadas a los jóvenes y sus familias», aseguró Herrero, quien destacó el papel del programa «Espacio Joven», que cada fin de semana ofrece alternativas de diversión en el Casino de la villa. La nueva normativa controlará igualmente las acciones derivadas del «botellón», como los ruidos o las basuras que no se recojan y amonestará a aquellos que realicen sus necesidades fisiológicas en plena calle. «Habrá una graducación de las sanciones, pero la ordenanza dotará a la Policía Local y a la Guardia Civil de mecanismos para actuar contra estos comportamientos», añadió.

El pasado verano, la localidad de Ribadesella logró pasar capítulo en la historia del «botellón» en sus calles con la aprobación de una ordenanza municipal que controla el consumo de alcohol en la vía pública que movilizó a la Policía Local las 24 horas para garantizar el cumplimiento de la normativa. Llanes y Gozón fueron los otros dos municipios elegidos para desarrollar una experiencia piloto sobre estas reuniones juveniles en las que la bebida, el ruido y los restos de basura se convierten en protagonistas indiscutibles de las noches de ocio.

La delegación de árbitros del Oriente de Asturias cuenta desde ayer con una sede en la Casa de Cultura llanisca. El espacio se destinará a labores administrativas y de formación. Marco Díaz Llorente será el delegado. Actualmente, el Oriente cuenta con doce ábitros -dos de ellos mujeres- de 15 a 18 años, informa M. TORAÑO. En la imagen, la alcaldesa, Dolores Álvarez, y el concejal José Herrero -derecha- con autoridades del fútbol regional.