Infiesto (Piloña),

Lucas BLANCO

Al Museo del Reloj de Infiesto sólo le falta darle cuerda. Eso es lo que se podría concluir después de que desde la asociación Avagar, propietaria de las colecciones que serán expuestas en lo que será conocido como la «Casa del Tiempo», señalaran ayer que las salas de exposiciones se encuentran ya «listas para ser abiertas», pero la ausencia de un convenio entre el Ayuntamiento y el colectivo impide que éste pueda abrir todavía sus puertas.

Según ambas partes, las conversaciones para llegar a un acuerdo ya se han iniciado, si bien aún no ha sido posible llegar a un acuerdo definitivo por diversas causas. Según fuentes del ejecutivo local, el proceso administrativo para iniciar la actividad de la sala se ha visto ralentizado por la «forma atípica» a la hora de ponerla en marcha. «Nos hemos encontrado un equipamiento materialmente casi finalizado, pero con la parte administrativa sin hacer», señaló la edil de Hacienda, Patricia Ferrero.

Del mismo modo, Ferrero indicó que todos estos trámites se han visto aún más ralentizados por la existencia de un tercer actor dentro del acuerdo que también debe ser tenido en cuenta en las negociaciones. «Hay que tener en cuenta que el edifico de la Obra Pía donde se ubicará el museo es propiedad de una Fundación que nos lo tiene cedido por unos años y todo lo que acordemos debe contar con su aprobación», apunta la edil.

Por otro lado, desde el Ayuntamiento están a la espera de un informe proveniente de la secretaría municipal que indique cuál es el modelo de gestión adecuado para el equipamiento. «Queremos ir sobre seguro y ello llevara tiempo, pero intentamos actuar con la mayor celeridad posible para dar un uso adecuado a la colección de relojes de Avagar», señaló la concejal.

Desde el colectivo, aseguran estar ansiosos por abrir cuanto antes el museo, aunque prefieren no dar una fecha exacta pues aseguran que ahora todo queda a expensas de la voluntad del Ayuntamiento. «Por nuestra parte está todo claro. Aportaremos los relojes y lo que haga falta para sacar el proyecto adelante cuanto antes», señala ilusionado el presidente del colectivo, Pedro Suárez, que ve cómo un proyecto iniciado por él hace más de una década está a punto de ser culminado gracias a la inversión realizada desde la mancomunidad de comarca del Sueve.

En cuanto a las condiciones del convenio, ni el Ayuntamiento ni Avagar han aportado aún datos concretos, si bien todo parece indicar que la parte más difícil de acordar será la económica, pues entre ambos actores tendrán que sostener el mantenimiento del local y la situación actual de las arcas municipales no parece que vaya a facilitar el acercamiento de posturas.