En un día de octubre veraniego, donde imperó el sol y el calor, la localidad llanisca de Lledías celebró por todo lo alto la festividad en honor a San Francisco. Fieles de todas las partes del concejo se dieron cita en torno a la capilla para participar en los festejos que comenzaron a las diez de la mañana con un pasacalles con el gaitero Santi Galguera y tamboritero Ángel Rey.

Tres imponentes ramos recorrieron el centro de la localidad pasadas las doce de la mañana en dirección a la capilla, donde tuvo lugar una misa solemne que ofició el párroco de Posada, Aurelio Burgos. El ramo de menor tamaño, decorado con rosquillas, hortensias y cintas de colores, fue llevado a hombros por los jóvenes Pablo Menéndez, Rosendo Noriega, Martín Peral, Saúl Peláez, Xicu Noriega y Juan Francisco Noriega.

Del ramu mediano colgaban roscos de pan dulce. Sus portadores fueron Fidel Argüelles, Gorka Santoveña, Gustavo Berbes y Fran Piñera. El tercer ramu estaba cuajado de enormes roscos de pan. Se encargaron de llevarlo Fran Llera, Mika Espeso, Santos Noriega y Santiago Calleja.

Acabada la misa, se formó la procesión. Medio centenar de mujeres vestidas con el traje de aldeana pusieron la nota de color mientras cantaban y tocaban la pandereta al ritmo que marcaban Laura Argüelles y Melanie del Valle con el tambor. La salida de la imagen de San Francisco de la ermita estuvo acompañada de una imponente traca seguida de una descarga de cohetes que hizo temblar el suelo. Rosendo Noriega, Miguel Alonso, Jairo Peláez y Antonio Suárez llevaron las andas con solemnidad. Durante la procesión sonó con intensidad la campana de la capilla que repicaba Luis Carrera.

El cántico del ramu antecedió a su subasta, que dirigió Miguel Alonso. Acto seguido tuvo lugar un aplaudido festival folclórico donde el público presente disfrutó con la interpretación de la jota de Cadavedo, la jota del Cuera, el quirosanu, el fandango de Pendueles, el xiringüelu de Naves y el pericote. Por la tarde se interpretó la danza prima y tuvo lugar una animada verbena.