D. O.

Entre abril y agosto de 1937, cuando las columnas gallegas ya habían entrado en Oviedo, se temía que el ejército nacional iniciase una ofensiva desde la capital hacia Gijón y Avilés. Los republicanos construyeron una serie estructuras defensivas en forma de anillos concéntricos alrededor de Oviedo para evitarlo. Una parte de esas construcciones aún se conserva en buen estado en Las Matas, en Colloto, frente a la entrada del polígono del Espíritu Santo, pero corren peligro de desaparecer debido al desarrollo urbanístico de la zona. Para reivindicar su conservación a través del conocimiento de la zona de casi dos kilómetros de trincheras, nidos de ametralladora, puestos de mando y casamatas (estructuras para colocar cañones) la asociación Arama 36/37 y el área de reclutamiento de la Subdelegación de Defensa en Asturias organizaron ayer una visita guiada.

Un grupo de cerca de 40 personas, entre reservistas (oficiales y suboficiales al mando de un teniente coronel) y miembros de la asociación recorrieron la zona guiados por José García, catedrático de instituto, y el historiador Félix Feito, ambos directivos de la asociación Arama, que lucha por recuperar las fortificaciones militares.

El objeto de la visita, según explicaron los responsables de la asociación, es promover que el conjunto construido durante los primeros años de la Guerra Civil forme parte del catálogo de patrimonio histórico de Asturias, «pero lamentablemente tiene sus días contados, ya que está afectado por el plan urbanístico de Ciudad Jardín».

Los visitantes conocieron de primera mano cómo se hacía la guerra en aquellos años y pudieron ver las pintadas y mensajes que dejaron los militares republicanos en las paredes, nombres y fechas de la historia de Oviedo y de toda Asturias.