Seis trabajadores de una empresa privada deberán incorporarse mañana a su puesto en la residencia de mayores Santa Teresa de Oviedo, centro dependiente del ERA (Establecimientos residenciales de Asturias). El organismo dependiente del gobierno regional ha subcontratado a una empresa privada parte de los servicios que en la actualidad desarrollan los empleados públicos con cargo de operario. Se trata de trabajos en la zona del ofice, de preparar los carros con la comida y de atender el comedor del personal.
Los empleados públicos ya han presentado un recurso ante la Consejería de Servicios Sociales del Principado, responsable del ERA y el viernes el delegado sindical de la Corriente Sindical de Izquierdas (CSI) acudirá a la inspección de trabajo e iniciará los trámites legales para denunciar el caso en los tribunales.
Los trabajadores temen que en unos meses se queden sin empleo. Por el momento no está previsto ningún despido "pero si se van acabando los contratos amortizarán los puestos", aseguran. Los empleados públicos de Santa Teresa dicen que no tienen nada en contra de los trabajadores de la empresa que se hará cargo de esas operaciones pero lucharán contra la privatización. Ahora son ellos los que hacen esas tareas y explican que si se necesita gente "hay más de mil personas en la bolsa de trabajo".
Los trabajadores públicos estudian movilizaciones ante el temor de la pérdida de sus puestos de trabajo pero por el momento iniciarán la vía judicial.
