Lo definió a la perfección Pablo Junceda, director general de Sabadell-Herrero y subdirector general del Banco Sabadell: "Igual que una persona no puede vivir sin corazón, una ciudad tampoco, y el corazón de una ciudad es el comercio". Por eso, su entidad se ha sumado a la campaña "#reconquistalacalle" de la Asociación de Comercio de Oviedo. Se trata de una iniciativa que busca hacer latir de nuevo ese corazón comercial tras el parón de dos meses debido al estado de alarma por la pandemia del coronavirus.

"En estos momentos, todos tratamos de hacer lo posible para recuperar el latido de ese corazón e impulsar a los vecinos y visitantes a reconquistar el comercio de Oviedo", apostilló Junceda.

El director del Sabadell-Herrero participó en la presentación de la campaña que su entidad financia con 3.000 euros. Todos los clientes que compren en el comercio de Oviedo podrán optar a un vale de 50 euros, hasta el tope de esos 3.000, con tan solo subir a sus redes sociales una foto en la que deben etiquetar la campaña, al Sabadell-Herrero y a Comercio de Oviedo, además de mencionar a tres amigos. Se trata de que los clientes vean que comprar en el comercio de la ciudad es posible con todas las medidas de seguridad. El sorteo tendrá lugar la primera semana de junio y el bono se podrá gastar hasta finales de julio.

El presidente de Comercio de Oviedo, Ignacio del Río, destacó que "ahora que hemos visto lo que es una ciudad sin vida, sin comercio, debemos trabajar para que todo vuelva a la normalidad". El comerciante destacó que "Oviedo lo ha hecho muy bien y poco a poco vamos superando el virus. Lo hemos logrado entre todos quedándonos en casa, pero ahora llega el momento de volver a salir y volver a acudir al comercio de Oviedo, de tradición y calidad".

Respecto a las medidas de seguridad puestas en marcha por los responsables de los negocios ovetenses, Del Río insistió en que todos cumplen "por triplicado" las normas que se han impuesto. De este modo, en todos los comercios disponen de mascarillas, guantes y geles para proporcionar a los clientes. Además se respetan a rajatabla las medidas de aforo y de seguridad, o el que las prendas que se prueba un cliente son desinfectadas y permanecen en cuarentena. Seguridad para trabajadores y clientes, es su máxima.