Defensa crea el "corredor de la Plata" para potenciar la fábrica de armas de Trubia

El Gobierno plantea la colaboración industrial de las factorías trubiecas con plantas militares castellano-leonesas, extremeñas y andaluzas

Instalaciones de la Fábrica de Armas de Trubia, en una imagen de archivo. | MIKI LOPEZ

Instalaciones de la Fábrica de Armas de Trubia, en una imagen de archivo. | MIKI LOPEZ

J. L. S.

El ministerio de Defensa acaba de publicar su estrategia industrial para los próximos años, en la que aboga por una modernización de las fuerzas armadas españolas para adaptarlas a los nuevos tipos de conflictos internacionales. En esa hoja de ruta figura revalorizar ciertos activos fabriles como la fábrica de armas de Trubia o la factoría que Expal gestiona en esa misma localidad. Con ese objetivo, el departamento que dirige Margarita Robles recoge su intención de crear un corredor industrial –de hecho lo ha bautizado como "Corredor de la plata"– con el que pretende fomentar las sinergias entre industrias que fomenten la innovación y la colaboración entre empresas ligadas con la defensa.

Lo del fomento de esos dos componente de la industria –la innovación y la colaboración– se debe, puntualiza el ministerio, a que el de la Defensa es un "sector con un importante componente tecnológico que suministra productos de alto valor añadido, con una fuerte componente exportadora y que requiere de formación altamente especializada". También señala que el objetivo de estos corredores es el de actuar como un "elemento de distribución de la riqueza en el territorio a través de las inversiones públicas y privadas, de tal forma que se distribuya la financiación aguas abajo en la cadena de suministro en la mayor proporción posible dentro del territorio nacional".

Ahora mismo ya hay tres grandes corredores industriales de la Defensa en España, que llevan unos cuantos años funcionando y que se están mostrando eficaces para facilitar la cohesión de esta industria. El ministerio quiere impulsar uno nuevo que partirá de Trubia y se extenderá hasta la planta que Santa Bárbara Sistemas tiene en la localidad sevillana de Alcalá de Guadaira y donde, por ejemplo, se realiza el mantenimiento de muchos de los blindados que se fabrican en Oviedo. Entremedias –en la localidad de Cuadros en León– se encuentra el laboratorio de ensayos de cuadros de León (más conocido como el INTA) que, de vez en cuando, también es utilizado por la propia Santa Bárbara para realizar ajustes y pruebas en sus vehículos. Se trata, según Defensa, de un banco de pruebas para chequear los choques térmicos o las vibraciones de diferentes sistemas de defensa y donde se llevan a cabo experiencias relacionadas con el diseño y la fabricación de misiles.

Justo al lado, en la provincia de León, la Unidad Militar de Emergencia (UME) cuenta con un batallón de emergencias (en la base militar Conde Gazola en la localidad de Ferral de Bernesga) que próximamente acogerá una unidad para la fabricación de drones que, destaca Defensa, supondrán un importante impulso a la economía local. Más al sur está prevista a reapertura del acuartelamiento Monte la Reina en Toro (Zamora) que "también impulsará la actividad de defensa, generando puestos de trabajo y colaborando en la generación de tejido industrial y reactivando servicios".

Defensa asegura que en este corredor también se incluirían las capacidades de fabricación de munición y de componentes de armamento ubicadas en diferentes localidades de Extremadura y Castilla y León. Son puntos de producción con los que, por ejemplo, la factoría trubieca de Expal también puede establecer relaciones comerciales.

Fuentes de este incipiente sector en Asturias aseguraron que lo que se busca es fomentar la actividad industrial porque la inversión en Defensa ayuda a la cohesión territorial y a generar actividad económica. Estos corredores, al fin y al cabo, son lugares delimitados donde el Ministerio considera que es necesario realizar un importante esfuerzo inversor. El corredor de la Plata tiene raíces históricas ligadas a la antigua vía que conecta Asturias con Sevilla.

Según explicaron esas mismas fuentes, a raíz de la guerra de Ucrania las grandes compañías han replegado velas y estrechado lazos con los productores locales, lo que ayuda a generar una gran actividad económica y crean un importante efecto tractor. Este proceso de "nacionalización" de proveedores que ha emprendido Santa Bárbara está ya, aguas abajo, teniendo importantes efectos sobre la industria regional, que se está viendo beneficiada de la altísima carga de trabajo que tiene la fábrica de armas de Trubia. El gobierno del Principado, además, también está colaborando con la compañía en este sentido, haciendo de mediador con posibles proveedores locales. De hecho, ese es uno de los objetivos y de las razones por las que hace unos meses se puso en marcha la patronal del sector de la Defensa en Asturias y que agrupa a compañías con un alto grado de compatibilidad entre ellas.

El propio Principado de Asturias declaró al sector de la Defensa como estratégico –junto a otros cuatro más– el año pasado. Eso se ha traducido en más ayudas, especialmente para las compañías más pequeñas, aquellas que tienen más complicado optar a los grandes contratos nacionales e internacionales, pero que son imprescindible en este engranaje industrial.

Se da la circunstancia de que la industria de Defensa asturiana también forma parte del conocido como corredor del norte que parte desde Galicia y llega hasta Bilbao. En esa franja, según las cuentas del ministerio, hay 167 compañías que, directa o indirectamente, se dedican a este sector.

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