La OSPA llega "en buena forma" para ofrecer su recital "Con forza" en el Auditorio de Oviedo

El programa incluye tres obras de Chin, Bartók y Mozart y tendrá a Nuno Coelho en la dirección, con Roman Simovic de nuevo como solista

La OSPA, con Roman Simovic en el centro, en su concierto de la semana pasada. | David Cabo

La OSPA, con Roman Simovic en el centro, en su concierto de la semana pasada. | David Cabo / A. Rubiera

A. Rubiera

A. Rubiera

La Orquesta Sinfónica del Principado llega mañana viernes a su tercer concierto de abono en Oviedo, en el Auditorio Príncipe Felipe, con patrocinio de LA NUEVA ESPAÑA Y con un programa que es una declaración de intenciones: "Con forza". Un recital que se apoyorá en tres obras: "Subito con forza", de la compositora surcoreana Unsuk Chin, afincada en Alemania; Concierto para violín nº2, del húngaro Béla Bartók, y finalmente en la Sinfonía nº4º "Júpiter", de Mozart. Y un recital al que la formación asturiana llega "en muy buena forma, y por eso me encanta hacer este repertorio con ellos", dice Nuno Coelho, director portugués de la OSPA, que está en su segunda temporada llevando a la Orquesta Sinfónica de Asturias por los derroteros que más le interesan.

Coelho describe así el concierto de mañana viernes. "Empezamos con una obertura de una compositora surcoreana contemporánea que es una obra de homenaje a Beethoven, con algunas referencias conocidas a ‘Leonora’, a la ‘Quinta Sinfonía’... Es una obra corta pero muy impactante y con mucha energía", explica. Seguirá el recital "con el Concierto nº 2 de Bartók, que lo tocamos con nuestro colaborador y artista en residencia, Roman Simovic, que viene de tocar como solista y director la semana pasada. Este concierto de Bartók es muy especial, uno de los más importantes del siglo XX del repertorio para violín y orquesta, con sus elementos de folclore húngaro. Es una obra escrita en 1939 y lleva incluído este impacto de lo que estaba pasando en Europa. También hay algo de incertidumbre y deja en el aire un poso algo más trágico, pero es increíble y una obra que requiere del virtuosismo del violín", añade.

Por último, sonará la Sinfonía nº41, "la última que escribió Mozart. Es una sinfonía que forma parte de un tríptico y es una obra magistral muy conocida, en parte, por su último movimiento donde Mozart va introduciendo cinco temas distintos a la vez y al final vienen todos juntos. Es como escuchar cinco conversaciones en cinco idiomas distintos. Pero todo tiene sentido y es una combinación absolutamente increíble", concluye el director antes de emplazar a "todo el mundo" a gozar de la música de la OSPA en el Auditorio.