Juan Álvarez ya tiene calle en La Florida, el barrio "utópico" que dibujó en los ochenta

Juan Álvarez, el ingeniero que ideó el barrio de La Florida y lideró las negociaciones para convertirlo en realidad, tiene oficialmente desde ayer una calle en la zona por la que tanto trabajó. El edil de Urbanismo durante el segundo mandato del socialista Antonio Masip (1987-1991), recibió un sincero homenaje de amigos, compañeros y políticos de los diferentes partidos cuando apenas faltan unos días para que se cumplan once años de su fallecimiento. "Tu legado siempre estará entre nosotras y sabremos transmitirlo a nuestras familias cuando seamos mayores", leyó María Álvarez, nieta del homenajeado para cerrar un acto lleno de halagos para un "negociador nato", que "antepuso el interés ciudadano al rédito político".

El alcalde, Alfredo Canteli, fue el encargado de hacer entrega a la familia de la placa conmemorativa de un acto pendiente desde hace una década. "Lo conocí muy poco, pero todas las referencias que tengo son de que era una buena persona, un buen edil y un gran técnico", sostuvo Canteli, en medio de un fuerte temporal de lluvia y viento.

Los hijos del homenajeado, el edil socialista Juan Álvarez Areces y su hermano Enrique, fueron los encargados de recibir la placa en un acto al que asistió una nutrida representación política. El consejero de Fomento del Principado, Alejandro Calvo, se sumó al acto, como también lo hicieron el edil del PP Nacho Cuesta, una nutrida representación de concejales de PSOE, IU y Vox, así como el expresidente del PP de Asturias Ovidio Sánchez.

Entre las intervenciones destacó la de Antonio Masip. El exalcalde recordó su visita a Álvarez en el hospital junto a Carlos Fernández Llaneza un día antes de su fallecimiento. "Se levantó en su lecho de muerte, cruzó el pasillo, señaló al horizonte y me dijo –señalando a La Florida– que era el mejor legado que dejaba de mi mandato", apuntó el exregidor carbayón, ahondando en el orgullo de Álvarez por haber contribuido a crear "un barrio utópico inspirado en las grandes avenidas de Vitoria y Cáceres".

Tras él, Carlos Llaneza consideró que la ubicación de la calle, situada justo al lado del nuevo recinto ferial del barrio –que Canteli prometió estrenar "pronto"–, "no puede ser mejor". Recordó, al igual que Masip, su última visita a Álvarez en el hospital. De él afirmó conservar grandes recuerdos. "Juan era muchas cosas: un buen profesor, un gran profesional y un magnífico concejal de Urbanismo, posiblemente de los mejores", declaró el actual portavoz socialista, añadiendo al final de su intervención que "fue, sobre todo, un buen paisano".

Por parte de la familia, su hijo Enrique fue el encargado de hacer un repaso de la trayectoria personal y profesional del exedil desaparecido. Recordó su papel de asesor del exalcalde gijonés José Manuel Palacio, especialmente a la hora de desarrollar el Plan General de la ciudad, de la mano del arquitecto Ramón Fernández-Rañada, recientemente fallecido, así como su trabajo en Oviedo para sacar adelante proyectos como el parque de Montealto o el barrio de La Florida con un gran talante político. "Era un negociador incansable. Jamás miraba al adversario como alguien al que derrotar, sino a alguien a quien convencer. Luchaba por el bien de la ciudad", proclamó Enrique Álvarez, muy agradecido por un reconocimiento tan tardío como merecido.