La música ancestral le suena bien a las nuevas generaciones en Oviedo

El artista y constructor de instrumentos Abraham Cupeiro presenta su nuevo disco ante centenares de escolares: "Flipan con el espectáculo"

Abraham Cupeiro, en primer término tocando su cornu romano, con la Orquesta Filarmonía detrás.

Abraham Cupeiro, en primer término tocando su cornu romano, con la Orquesta Filarmonía detrás. / Fernando Rodríguez

Cientos de niños tomaron este miércoles el Teatro Filarmónica con la euforia de un día en el que se sale de la rutina, aunque sin saber bien el tipo de espectáculo que iban a presenciar. Pero cuando Abraham Cupeiro se subió al escenario junto a la orquesta Oviedo Filarmonía para tocar instrumentos que dejaron de fabricarse hace siglos, la inquietud de los escolares derivó en silencio y fascinación. "¡¿Qué es eso?!", exclaman los jóvenes al ver el enorme cornu romano con el que traslada al público a la época del imperio romano, en concreto a la llegada de las tropas de Escipión para luchar contra los cartagineses. "Flipan con el espectáculo. Esperaban otro tipo de concierto", coinciden los profesores.

Cupeiro, trompetista y constructor de instrumentos gallego, presenta en Oviedo "Mythos", su último disco junto a la orquesta carbayona, con la que ha trabajado desde sus inicios. Su música, que sale de algunos de los 50 instrumentos que ha elaborado él mismo, es el hilo conductor de la mitología, tema principal de su trabajo. Leyendas griegas, romanas y persas con las que el artista hará triplete escolar estos días, a la espera de otras dos actuaciones en el FIlarmónica programadas para el jueves y el viernes. En este estreno se dieron cita alumnos de Primaria de los colegios carbayones Nazaret, Auseva, Santa Teresa, La Gesta, La Milagrosa, Santo Domingo, Buenavista II y El Villar (Trubia).

Los escolares saludan a la orquesta desde el patio de butacas del Teatro Filarmónica.

Los escolares saludan a la orquesta desde el patio de butacas del Teatro Filarmónica. / Fernando Rodríguez

En total, 3.000 alumnos serán testigos del espectáculo, donde tras cada pieza, Cupeiro aparece con un instrumento de viento nuevo. El mencionado cornu, un carnyx celta de la Edad de Hierro o la caracola de Atlantis (la ciudad legendaria bajo el océano descrita por Platón) fueron los más aclamados. "En los tiempos actuales, contar historias con música y con instrumentos olvidados, nos permite viajar el pasado y evocar emociones en el público", valoró Cupeiro tras su primera actuación.

Antes del concierto, la música clásica no les sonaba del todo bien a los pequeños del Auseva, que preferían otros géneros como el pop o el reggaetón. No obstante, pronto se quedaron prendados del estilo de Cupeiro y acompañaron las piezas con palmas y movimientos de cabeza al son de los sonidos ancestrales. Una de las batallas personales del artista gallego es acercar la música clásica al público general, del que cree que se ha alejado en los últimos años. "Estas sonoridades encajan bien con los jóvenes, que no tiene prejuicios. A algunos les parecen hasta futuristas porque no conocen los instrumentos", explicó el autor.

El plato fuerte para el músico será próximo 21 de marzo con su actuación en el Campoamor, una cita que espera con ansias ante un público asturiano al que "guarda mucho cariño". Pero, antes, le toca captar la atención de los más jóvenes. "Los niños son un público muy exigente y cuesta captar su atención, pero creo que hemos conectado bien con ellos. El objetivo es trasladarlos con la música a un mundo más apaciguado que el que les ha tocado vivir", zanjó satisfecho.