La curiosidad por la tecnología acompaña al ovetense Jaime Arias Galán desde que era un niño. Siempre quería conocer el funcionamiento de las “máquinas”, entender qué había detrás de los móviles, ordenadores, etcétera. Y si a esto se le une que le gustaban las Matemática sy la Física desde un punto de vista aplicado, no es extraño que ya en 3º de ESO tuviera claro lo que quería estudiar: Telecomunicaciones. “Era lo que más me llamaba”. Le llamaba y le iba “como anillo al dedo”, pues finalizó el grado con una media de 8,9, y ayer recogió el premio que patrocina Banco Santander al mejor alumno de su promoción. También la finalizar el instituto le reconocieron su excelente trabajo con una matrícula de honor. Sin dudas, grandes alicientes para seguir progresando en una carrera de fondo que acaba de empezar, pues tan sólo tiene 22 años. Si tuviera que destacar algo de los cuatro año de grado, sería “el enfoque de ingeniería para resolver problemas y encontrar soluciones, algo que sirve también sirve para el día a día en cualquier ámbito de la vida”, una vida que, en su caso, siempre ha estado ligada a las matemáticas y la física. También al deporte, un campo que le apasiona tanto a nivel teórico como práctico.
En la actualidad está cursando el máster de Ingeniería de Telecomunicación en la Universidad de Oviedo y, aunque prefiere no fijarse muchas metas concretas, si que tiene claro que quiere seguir preparándose y adquiriendo experiencia. “Muchas veces digo que tengo un problema, y es que me gustan muchos campos de la carrera y no me decanto por uno en concreto. Voy día a día y ya se verá en el futuro, si algo he aprendido es que las cosas pueden cambiar de forma radical de un día para otro”, desvela Jaime Arias, a quien en el futuro le gustaría empezar la carrera de Ciencia e Ingeniería de Datos.
“Siempre quería conocer el funcionamiento de las ‘máquinas’, entender qué había detrás de los móviles, ordenadores, etcétera”
Llegar hasta aquí le ha supuesto mucho trabajo, muchos esfuerzo y, sobre todo, mucha dedicación. “Sin dedicación no se consigue nada. En mi caso ayuda mucho estudiar o hacer lo que me gusta. Siempre he compaginado la carrera con otras labores y estudios, con esfuerzo, dedicación y una pizca de suerte puedes conseguir lo que te propongas”, sentencia.
Es importante destaar que, actualmente, la profesión de ingeniero técnico de telecomunicación se encuentra en cotas de plena ocupación y sus profesionales son unos de los más demandados en el ámbito tecnológico , además de contar con más perspectivas de futuro.
