A pocos días ya de que se produzca la apertura del mercado de invierno, Anquela evita hablar sobre posibles refuerzos para el Oviedo y limita más bien a la operación salida los movimientos en este periodo. "El mercado de invierno se usa para tapar deficiencias del proyecto. Tengo un filial del que puedo tirar perfectamente. Primero tienen que salir para que puedan entrar", comentó ayer el técnico en una entrevista en el programa radiofónico "Asturias Ser Deportivos". El técnico del conjunto oviedista reconoció también que ya había tenido contactos en otras ocasiones para poder entrenar al Oviedo, pero que no se materializaron: "Muchas veces he hablado con el Oviedo, pero siempre tenía trabajo, y yo los contratos los cumplo". Anquela indicó también que con la recuperación de Fabbrini hay que tener cautela: "El tiempo aproximado de curación son seis meses. Ojalá se incorpore cuanto antes, pero hay que ser cautos. Si en tres meses estuviese para jugar habría colas a la puerta del médico que lo recuperó". Además, el técnico azul confesó sobre el derbi asturiano disputado el pasado mes de septiembre en El Molinón que le emocionó el ambiente que se vivió y también el día previo: "En el entrenamiento previo al partido en el Tartiere con la afición faltó muy poco para que me saltaran las lágrimas".