Al Oviedo no conviene darlo por muerto nunca y menos aún cuando está por debajo en el marcador. El equipo de Anquela ha demostrado a lo largo de esta temporada tener un gran poder de reacción, y eso le ha llevado a conseguir cinco triunfos en partidos que comenzó perdiendo: cinco de los trece encuentros que llevan ganados los azules en lo que va de Liga. El último de ellos fue el que ganó al Granada (2-1) el domingo, con un gol del canterano Steven en el minuto 62. El inicio de la reacción lo protagonizó Forlín en el mejor momento posible, cuando el primer tiempo estaba a punto de concluir.

Pero si hubo una remontada que será recordada por mucho tiempo será la que protagonizaron en el regreso del derbi asturiano al municipal ovetense. En el encuentro más esperado, el Sporting se puso por delante en el marcador con un gol de Jony. Los azules fueron capaces de reaccionar, le echaron la garra suficiente y contaron con el acierto de Mossa, que empató poco después de que se adelantaran los rojiblancos y que culminó la remontada con un golazo nada más comenzar la segunda mitad.

Esas son las dos últimas remontadas que ha protagonizado el conjunto azul, pero no son las únicas. Una de las más significativas fue precisamente la primera, en la que consiguieron imponerse por 3-2 al Lugo. Lo fue por el momento en el que llegó. El Oviedo había caído por 2-0 en la anterior jornada en el campo del Alcorcón, en lo que fue un muy mal partido de los azules. Los azules vivían días de zozobra, lejos de la zona alta de la clasificación y con muchas dudas. Ese partido en casa ante el Lugo fue clave para la posterior reacción.

Las cosas se le pusieron feas a o los carbayones cuando Herrera adelantó a los gallegos. Pero en la segunda mitad primero Saúl Berjón de penalti y cuatro minutos después Linares dieron la vuelta al marcador. Fue capaz aún el Lugo de empatar el choque por medio de Azeez y un golazo de Aarón Ñíguez dejó finalmente los tres puntos en Oviedo.

La siguiente jornada, el equipo azul volvió a remontar un partido esta vez le sirvió para ganar su primer encuentro fuera de casa. Lo hizo en el campo del Nástic por 1-2. Manu Barreiro se adelantó e la primera mitad de penalti y, cuando todo estaba en contra, en la segunda parte los azules fueron capaces de darle la vuelta al marcador. Primero con un cabezazo de Carlos Hernández y después con un penalti cometido sobre Mossa en el tiempo de descuento y culminado por Aarón Ñíguez.

La otra remontada llegó en plena racha de los azules y sirvió al Oviedo para imponerse 2-1 al Almería. En ella el protagonista fue Toché. Y eso que el delantero murciano salió desde el banquillo. Lo hizo con el marcador en contra gracias al tanto de Fidel. El delantero fue capaz de marcar el gol del empate tres minutos después de ingresar en el campo y de dar la asistencia para que acabó con el gol en propia puerta del portero René.

La remontada ante el Lugo supuso para el Oviedo un cambio de rumbo que dio inicio a una racha que le permite ahora estar en la lucha por el ascenso a Primera. La del domingo ante el Granada puso fin a una racha de cinco partidos sin ganar. Los azules aspiran a que sea el comienzo de un final feliz.