Christian Fernández ya tenía galones en el Oviedo y tras su renovación tendrá aún más. El defensa cántabro, de 34 años, inicia la pretemporada del que será su quinto curso en el Oviedo. Un club en el que no oculta que le gustaría acabar una carrera futbolística que ha sido muy dilatada y en la que casi siempre ha contado con la confianza de unos entrenadores que han visto en él un guerrero dispuesto a entregar hasta la última gota de sudor por su equipo.

Después de llegar a un acuerdo con el club para renovar por una temporada más, con opción de que sea otra en función de objetivos, el jugador se encuentra ya totalmente integrado en el trabajo del grupo a las órdenes de Ziganda. Ayer compareció ante los medios de comunicación tras la sesión de entrenamiento de la mañana. Entre los mensajes que quería lanzar este futbolista que puede jugar de central y de lateral izquierdo es que no le apetece vestir otra camiseta que no sea la azul hasta el final de su carrera: "Mi prioridad siempre ha sido quedarme aquí y al final ha sido así. Espero que sea hasta el fin de mi carrera", apuntaba.

Christian, un tipo que no suele esconder las cosas, aseguraba no haber sentido "ningún tipo de intranquilidad" en esta renovación de contrato que ha tenido que ser a la baja en cuanto al sueldo: "Tenía la palabra del club de que se iba a llegar a un acuerdo y hay veces que las negociaciones llevan su proceso, y más en una situación como la que estamos viviendo, con una pandemia que ha trastocado todo a nuestro alrededor y también a los clubes de fútbol", explicaba sobre este asunto.

Lo de la rebaja del sueldo es algo que ha sido compartido por muchos de sus compañeros tanto en el Oviedo como en otros clubes, por lo que se ha entendido mejor. Al respecto, Christian reconoce que en su caso ha sido una cosas de dos "Las dos partes hemos puesto de nuestra parte y al final se ha firmado el contrato; estoy satisfecho, el club ha hecho el esfuerzo que podía hacer y yo también". Un acuerdo que espera "no sea el último al que lleguemos".

Pero había otro mensaje que Christian quería mandar en su comparecencia de ayer y ese iba dirigido a uno de sus grandes compañeros en el Oviedo y que también está negociando para seguir ligado a la entidad, Saúl Berjón, que todavía no ha firmado. Para Christian la continuidad del ovetense es muy importante, entre otras cosas, porque es el capitán del equipo: "Espero que siga, es un jugador de casa, que ha sido importante todos estos años y, lo más importante de todo, es el capitán".

También valoró Christian la importancia de que continúe Ziganda al frente del equipo y que se tenga algo de trabajo realizado antes de comenzar la temporada: "Llevamos un trabajo hecho, el año pasado hubo tres entrenadores y eso muchas veces es sinónimo de fracaso. Nosotros pudimos salvar la categoría en uno de los años que más cara ha estado la salvación, y creo que fue en parte al trabajo que realizó el entrenador y al compromiso del vestuario", concluía.