Bajo un sol que abrasaba, con Ziganda subido en lo alto de andamio y la plana mayor del club muy atenta en la grada, el Oviedo 2021-22 se presentó en El Requexón con una novedad significativa: el estilo. El Cuco quiere un Oviedo más protagonista. Que tenga más el balón en campo rival. No parece un farol.

Prueba de ello es el dibujo utilizado en los diez primeros días de la pretemporada: un 4-3-3. Esquema prácticamente desconocido en el equipo azul en la etapa del Cuco. La idea parece ser potenciar la posesión en el centro del campo y crecer desde el balón. Ayer, en el primer partidillo del verano, con jugadores mezclados del primer equipo y del Vetusta, esa fue la idea. “El resultado es lo de menos”, bramó varias veces Christian Fernández, que abroncó a los más jóvenes en repetidas ocasiones. Y el resultado era lo de menos, pero la idea ya está sobre la mesa. Ambas formaciones utilizaron el citado 4-3-3, un dibujo del que ya intentó tirar Anquela al iniciar su segunda temporada en el Oviedo.

Finalmente, los carrileros ganaron la partida a los centrocampistas y el boceto se quedó en el cajón tras unos pocos partidos. De momento, el Cuco ensaya con tres en el centro. Un equipo formó ayer con Femenías; Lucas, Arribas, Costas, Cornud; Jimmy, Sangalli, Álex Suárez; Viti, Borja y Obeng. El otro tenía a Hórreo; Jorge Mier, Grippo, Christian Fernández, Mossa; Yayo, Bernabéu, Riki; Steven, Osky y Javi Cueto.

 El resultado fue 2-0 para el primer conjunto gracias a un doblete de Sangalli, que metió dos tantos de bella factura: uno tras una cuchara y otro después de un centro de Cornud, de los más destacados. Precisamente el goleador Sangalli es el principal afectado por este cambio de sistema. El donostiarra pasa de extremo clásico a interior, sumando otros registros. El Cuco estuvo muy encima de él, al igual que de Cornud y Costas, los dos fichajes presentes en El Requexón a la espera de Matheus, que sigue solucionando unos trámites burocráticos antes de llegar a Asturias. La plana mayor de club –Jorge Menéndez Vallina, Manuel Paredes, Federico González, Rubén Reyes, Roberto Suárez, Antonio Rivas, César Martín y Pedro Luis González– presenció atentamente el partidillo de entrenamiento mientras Javi Mier y Vanderson realizaban trabajo al margen. El equipo descansa hoy, vuelve mañana al trabajo y el miércoles jugará un amistoso en Navia con cambio de rival de última hora por “motivos ajenos al Real Oviedo”. Pese a que estaba programado que se jugaría ante el Extremadura, finalmente el partido será ante el Majadahonda, de Primera RFEF, equipo propiedad de Alejandro Arribas.