El técnico del Málaga, Pablo Guede, dijo tras el empate ante el Oviedo que “podíamos haber hecho un poco más en ataque, pero fue el típico partido de Segunda División. Teníamos que igualar la intensidad de los duelos del rival e intentar desequilibrar físicamente. Creo que los duelos en la mitad del campo los controlamos bien, pero nos faltó un pelín arriba para hacerles más daño, si cabe, pero creo que ante un muy buen equipo en una muy buena racha”.

El entrenador malaguista se lamentó por la falta de gol y aseguró que “si hubiéramos jugado con el corazón en los últimos 10 minutos lo habríamos perdido. Quedan tres partidos, dependemos de nosotros y hay que tirar para adelante”.