La Unión: el imperio salense cimentado en el pimentón y la buena carne (que factura unos dos millones de euros al año)

La fábrica de embutidos con sede en Malleza amplía formatos y combinaciones de productos, apostando por una nueva línea de conservas

Inma Riesgo, actual gerente de Embutidos La Unión

Inma Riesgo, actual gerente de Embutidos La Unión / Á. R.

Ángela Rodríguez

Inma Riesgo, nieta de uno de los socios fundadores de Embutidos La Unión, es la nueva gerente de la fábrica. Enfundada en su bata blanca, esta Química de profesión capitanea, desde hace algo más de dos años, la empresa agroalimentaria salense, en la que trabajan unas diecinueve personas. 

Con productos libres de gluten, avalados por varios sellos de calidad, e incluidos en la marca asturiana Alimentos del Paraíso, La Unión es desde hace décadas uno de los emblemas del territorio. Anualmente, de la fábrica salen unos 112.000 kilos de chorizos, 80.000 kilos de morcillas, 100.000 kilos de panceta, y 10.000 de lacón, aproximadamente. Unas cifras importantes que se traducen en unos dos millones de euros de facturación.

“La primera fábrica se fundó en 1951. Habían empezado en Quintana y luego surgió comprar la casa con esta finca, hacia 1962. Los primeros productos eran el chorizo y la morcilla, lo más clásico. Luego se fueron incorporando la panceta, el lacón, y ahora hay también criollo, embutido de ciervo y jabalí. Además, a finales del pasado año sacamos unas conservas”, explica Riesgo. 

Su abuelo, uno de los tres socios fundadores, ejerció “más o menos hasta 1990”. Mientras, su abuela y otras mujeres de la familia atendían las carnicerías de Avilés y Pravia. “Ahora tenemos muchos formatos. Antes se vendía a granel y ahora se vende en packs de tres, de unidas, formato grande o pequeño. Con jamón…  A nivel nacional, se vende mejor el pack y en Asturias se compra el chorizo, la morcilla y la panceta por separado”, asegura. 

Morcilla con compota de manzana y picadillo cocinado en aceite de oliva listo para calentar y consumir son las nuevas conservas por las que apuesta la empresa. Una apuesta de Riesgo que ya ha conseguido subir la presencia de La Unión en las tiendas gourmet. “Actualmente, en torno al 90% lo vendemos a la gran distribución y el resto en tiendas especializadas. Además, tenemos la tienda online. La próxima conserva será de morcilla con algo de sidra”, avanza. 

En la fábrica de Malleza -con seis secaderos, un ahumadero de varios pisos, congeladores y numerosas máquinas dispuestas en más de 2.000 metros de instalaciones-, los viernes es “día de amasado para toda la semana siguiente”. El embutido pasa por el ahumadero, secadero, el bombo de salar y la cámara de salazones. Con diferentes tiempos ya sea panceta, chorizo o morcilla. 

Sobre las materias primas (frescas y congeladas), la carne de cerdo llega de Extremadura, el pimentón de La Vera y la ternera, asturiana. “El ajo, cebolla y demás lo compramos a empresas próximas, asturianas”, destaca Riesgo. Y es que no hacen falta muchos ingredientes más para elaborar embutidos de primera, con todo el sabor tradicional. 

La diferencia la marca, eso sí, el mimo con el que los trabajadores embuten, ahuman, cortan y etiquetan los productos. Embutidos La Unión cuenta con calidad certificada con la normativa IFS y controlada por FACE (Federación de Asociaciones de Celíacos de España).