¿Psicomotricidad en el colegio?

La Facultad Padre Ossó canaliza proyectos de investigación, prevención e intervención que pretenden conectar al maestro con el profesional sociosanitario a través de su clínica universitaria INYPEMA. Hace pocos meses, en este mismo periódico, se sugerían iniciativas desde la terapia ocupacional ante lo que popularmente denominamos "torpeza motora" en la infancia. Entre ellas, se describía el proyecto "La Caravana de los Sentidos" de la Facultad Padre Ossó.

El éxito del proyecto ha dado lugar a una serie de interrogantes que circulan entre familias y profesores y que ponen en el centro del debate la importancia del desarrollo psicomotor en la primera infancia.

El desarrollo psicomotor (DSM) es un proceso gradual determinado por aspectos físicos, biológicos, cognitivos, de interacción social y por las experiencias propias del aprendizaje cuyas alteraciones suponen un problema prevalente en la salud y calidad de vida de los niños y sus familiares.

En la primera infancia es cuando tiene lugar el desarrollo más rápido e importante del ser humano y es el periodo donde se establecen las bases del desarrollo posterior. En esta etapa, el desarrollo psicomotor desempeña un papel fundamental afectando principalmente a la competencia motriz, cognitiva y social.

Competencia motriz.

El desarrollo de la competencia motriz (CM) a lo largo de los años se ha postulado como piedra angular para un estilo de vida más activo y saludable en todas las edades. La CM es el grado de competencia de un individuo para realizar una amplia gama de habilidades motoras, así como los mecanismos que subyacen a este desempeño. La CM es un factor clave para el desarrollo de la motricidad, favoreciendo los mecanismos de aprendizaje, adaptación y transferencia, y se espera que ayude con el dominio de nuevas tareas motoras a lo largo de la todas las etapas de la vida, incluida la vejez. Además, la CM ha sido asociada con múltiples variables de desarrollo, incluida la salud física, psicológica y socioemocional. Es necesario incidir en la competencia motora desde el comienzo del proceso vital –desde la infancia–, previniendo y actuando en caso necesario sobre las alteraciones del desarrollo en esta etapa, lo cual facilitará una actitud activa en la adolescencia y asentará hábitos activos en la edad adulta, pudiendo finalizar así en la población mayor con un verdadero envejecimiento activo.

Importancia de la psicomotricidad en el ámbito escolar.

Son sobradamente conocidos los beneficios del ejercicio físico en niños y adultos. Por ese motivo, se han adoptado políticas e instaurado programas que favorecen su realización tanto dentro como fuera del contexto educativo. La actividad física interactúa con otros factores relacionados con la salud, como la psicomotricidad, que conducen, a una espiral positiva con un óptimo desarrollo psicomotor o una espiral negativa traducida en unas alteraciones del DSM que suponen un problema de salud, fundamentalmente en la primera infancia. En el último caso, la prevalencia estimada de alteraciones del desarrollo psicomotor infantil se sitúa sobre el 16 por ciento en países desarrollados. Estudios recientes sitúan la prevalencia en Asturias por encima del 13 por ciento. No obstante, lo verdaderamente llamativo es que casi el 70 por ciento de los trastornos de DSM no son detectados antes de la educación escolar. La detección temprana de estos problemas en el desarrollo psicomotor permitiría conocer sus limitaciones y restricciones, favoreciendo la intervención mediante ajustes en los programas educativos o terapéuticos, de manera que el niño pueda alcanzar un desarrollo pleno. Se ha sugerido que los problemas en el desarrollo psicomotor podrían ser detectados en el colegio, evitando consecuencias negativas en los procesos de aprendizaje. Investigaciones previas han sugerido que el retraso psicomotor detectado en los niños escolarizados menores de seis años viene determinado por la ausencia de un programa pedagógico adecuado.

En la actualidad, la psicomotricidad forma parte de la oferta educativa de la gran mayoría de colegios. Sin embargo, la OMS dice que un 60 por ciento de los menores de seis años escolarizados no se encontraban correctamente estimulados y su desarrollo se veía muy limitado. El maestro adquiere un papel relevante en la evaluación e intervención del desarrollo del niño. Sin embargo, la formación en el campo psicomotor generalmente es muy limitada. Destaca la formación en Psicomotricidad que imparte la Facultad Padre Ossó, adscrita a la Universidad de Oviedo, pionera en la formación psicomotriz, que lleva 18 años impartiendo el posgrado "Experto en Psicomotricidad" dirigido a maestros, terapeutas ocupacionales y ramas afines. Además, es una de las pocas facultades que ofrece la especialización de Psicomotricidad en el Grado de Maestro en Educación Infantil.

La Facultad ha abierto distintas líneas de investigación e intervención y trabaja en diversos proyectos que se concentran sobre una misma de línea de investigación enfocada a las alteraciones de desarrollo y que actúan bajo el control de la Clínica Universitaria INYPEMA.

Bajo un enfoque multidisciplinar liderado por terapeutas ocupacionales, maestros y educadores sociales, la Clínica Universitaria INYPEMA pretende dar respuesta a problemas sociales a través de la investigación aplicada, la prevención y la intervención.