Oviedo, E. G.

La Administración educativa asturiana deberá pagar una indemnización a un docente por daños morales sufridos al negarle, años atrás, un destino en el concurso de traslados. La sentencia de la Sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias estima que el profesor enfermó a causa de esta situación y le reconoce, en consecuencia, el derecho a percibir la indemnización, que asciende a varios miles de euros.

La historia se remonta al año 2001 cuando se convocó un concurso de traslados cuyas bases excluían la participación de determinados profesores. Pero una sentencia del Juzgado de lo contencioso-administrativo reconocía el derecho de esos profesores a participar en el citado concurso. El TSJA desestimó el recurso presentado por la Administración del Principado, pero finalmente la Consejería de Educación no hizo efectiva la sentencia, según señalaba ayer el sindicato ANPE hasta junio del año 2006.

Uno de los profesores afectados reclamó entonces a la Consejería de Educación la indemnización de los daños y perjuicios materiales (gastos) y morales (padecimiento de una enfermedad y pérdida de oportunidad de traslado a su provincia de origen) causados por las vicisitudes de la larga contienda judicial mantenida.

La sentencia finalmente señala que «acreditados estos hechos (la enfermedad y la imposibilidad de optar al traslado) ... consta justificada por las circunstancias concurrentes la gravedad de estos daños por los efectos personales, profesionales y económicos de larga duración».