Oviedo, Javier NEIRA
El Conservatorio Superior de Música del Principado de Asturias entregó ayer los cuatro premios fin de carrera correspondientes al curso pasado, en el transcurso de un concierto donde tocaron propios los galardonados.
Ana Sánchez Fernández recibió el premio de piano e interpretó con la orquesta del conservatorio uno de los tiempos del concierto para piano de Grieg. Clara Badía Campos recibió el premio de violín y tocó «Introducción y rondó», de Saint Saens. Juan Ignacio Rodríguez Rodríguez, premio de tuba, tocó el concertino de Bozza, y, finalmente, Gabriel Ureña Hevia, premio de violonchelo -ya forma parte de la orquesta Oviedo Filarmonía-, las variaciones sobre un tema rococó de Chaicovski.
El director del Conservatorio, Alberto Veintimilla, comentó que había sido un curso exigente con la adaptación a los criterios académicos de Bolonia y, asimismo, el reto de participar en el Espacio Europeo de Educación Superior para los 300 estudiantes con que cuenta el centro.
