"Ten fe ciega no en tu capacidad para el triunfo, sino en el ardor con que lo deseas. Ama tu arte como a tu novia, dándole todo tu corazón". Esta era una de las recomendaciones que hacía Horacio Quiroga en su "Decálogo del perfecto cuentista", un consejo que sin duda ha seguido la ilustradora Isabel Ruiz Ruiz en cada uno de sus trabajos. Un ejemplo sería, precisamente, el proyecto en el que la artista pone imágenes a Los cuentos de la selva salidos de la pluma del escritor uruguayo entre 1916 y 1918, editados ahora por Bookolia y por los que desfilan yacarés peleones, tortugas gigantes, abejas haraganas y otras criaturas que Quiroga imaginaba y conocía muy bien por residir gran parte de su vida en zonas salvajes de la región de Misiones. Sin duda Isabel Ruiz desprende ese "ardor" creativo en sus creaciones, la misma pasión con la que intenta dar visibilidad a las personalidades femeninas habitualmente olvidadas por una historia protagonizada y casi siempre escrita por hombres. De esa necesidad surgió el libro Mujeres, con el que la autora hizo emerger de la niebla del tiempo a numerosas heroínas y del que ya hay una segunda parte que recoge a 18 mujeres más, cuya huella, según la ilustradora, ha sido silenciada por esta sociedad patriarcal. Por las páginas de estos preciosos libros, nacidos gracias a una exitosa campaña de crowdfunding, y editados bajo el sello Ilustropos, desfilan científicas, escritoras, activistas, políticas, pintoras o cineastas que deberían formar parte de los referentes de nuestros hijos, ya que sus logros están al nivel -muchas veces, por encima- de los de cualquier hombre.
