El astillero figuerense Gondán paralizará su actividad hasta el 13 de abril, recurriendo al consumo de vacaciones y descansos y sin necesidad de activar un expediente de regulación de empleo, según el acuerdo alcanzado ayer entre la empresa y la representación sindical. La decisión se tomó por el temor de la plantilla a los contagios del coronavirus. "Para estar trabajando y que no haya productividad, llegamos al acuerdo de parar", señaló Álvaro Platero, presidente de la empresa. El presidente del comité laboral, Diego Fernández, se mostró satisfecho, dado el "miedo, casi pánico" de la plantilla a contagiarse la enfermedad.

La medida no afecta por el momento a la línea de fibra, ubicada en el muelle sur de Castropol, que al menos seguirá trabajando una semana más. "Estamos aún en negociaciones", señaló Platero. El parón será de catorce días laborales, pero, dado que cada año la empresa da cinco días de vacaciones en Semana Santa, solo quedan en el aire otros nueve días que se compensarán durante el año.

Daorje. Daorje -la principal empresa auxiliar de Arcelor, con 1.780 empleados en Asturias a finales de febrero- comunicó ayer a sus comités (Avilés y Veriña) su intención de iniciar la negociación de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) a cuenta del decreto ley del estado de alarma y aduciendo "una causa de fuerza mayor" para su puesta en marcha. La empresa cuenta con otro ERTE aprobado el año pasado que, según Vicente Núñez, presidente del comité de Avilés, "recoge todas las variables previstas por esta nueva situación"

Los dos comités de Daorje rechazaron "rotundamente" la aplicación de otro ERTE y acusan a la compañía de querer únicamente "acogerse a los beneficios económicos dispuestos por el Gobierno" y han denunciado ante la Inspección de Trabajo y la Secretaría General Técnica de la Consejería de Sanidad "los reiterados incumplimientos en materia sanitaria" contra el COVID-19.

Indra. La tecnológica española Indra, con un centro de investigación y desarrollo de soluciones avanzadas en tráfico aéreo en Gijón, anunció que negociará un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para la suspensión transitoria de contratos y reducciones de jornada junto con otras medidas complementarias en su negocio en España.

Trefilería Moreda. La compañía gijonesa Trefilería Moreda se sumará previsiblemente a las empresas que recurren a un ERTE. La empresa informó ayer a la representación laboral que tiene problemas para abastecerse de alambrón para trefilar -procedente de siderúrgicas de horno eléctrico- y también para suministrar pedidos a clientes, por la paralización de la actividad de los mismos en España y en otros países europeos a los que exportan. De momento, la empresa ha prescindido de 50 eventuales y estudia un ERTE para los fijos de plantilla: 250 trabajadores. El grupo industrial al que pertenece Trefilería Moreda ya tiene en marcha regulaciones temporales de empleo. Fuentes cercanas a la compañía señalaron que en el caso de que se apliquen "estas medidas tendrían un carácter temporal y se revertirían tan pronto como se pueda volver a la normalidad".

ArcelorMittal. La compañía siderúrgica ArcelorMittal ya comenzó a aplicar las medidas de flexibilidad laboral (mediante consumo de descansos y licencias, vacaciones de forma voluntaria, horas de formación y jornadas irregulares) que pactó el viernes con los sindicatos para su aplicación hasta que se aborde el ERTE anunciado.

Otros. En Avilés, al ERTE de Saint-Gobain -en activo desde el miércoles- se suma la solicitud presentada por una de sus empresas auxiliares: Sergon, especializada en el montaje y empaquetado de parabrisas. La empresa de concesionarios de automóvil Leomotor (dos en Avilés y otro en Luarca, con más de cien empleados) también negocia ERTE. El personal afectado supera el centenar de trabajadores. En las empresas Tayma y Vehinsa, ambas del sector del montaje, también preparan ya la documentación.