La clave del éxito reside en la anticipación, en el trabajo diario y sin mayor brillo que, de repente, da unos resultados inesperados y salva una situación muy comprometida. ¿Por qué la batalla frente al COVID-19 no depende en Asturias de los test ultrarrápidos que no acaban de llegar? Porque la sección de Virología del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) se ha dedicado en los últimos años a hacer los deberes, y eso le ha permitido procesar más de 7.000 muestras de pacientes desde el inicio de la propagación del coronavirus. Esta cifra arroja una tasa por millón de habitantes muy superior a las de otras comunidades autónomas.

"La sección de Virología ha trabajado bien y eso ha permitido planificar una respuesta a la pandemia. En una semana, a finales de enero, teníamos montada la técnica de pruebas de PCR para empezar a trabajar", explicó ayer a LA NUEVA ESPAÑA Fernando Vázquez, catedrático y jefe del servicio de Microbiología del HUCA. En este servicio está encuadrada la sección de Virología, dirigida por Santiago Melón.

Con la PCR (siglas en inglés de reacción en cadena de la polimerasa) se detecta y amplifica en tres horas un fragmento del material genético de un patógeno o microorganismo con una elevada fiabilidad. En el caso del COVID-19, es una molécula de ARN. En Alemania y en Corea se ha observado una cierta correlación entre la realización de tests masivos y un mejor manejo sanitario de la pandemia. ¿Motivos? Sobre todo, que permiten diagnosticar y poner a los infectados en aislamiento con cierta celeridad, y también detectar focos de contagio. "Tenemos la tecnología adecuada para, cuando aparece un patógeno nuevo, poder montar un test PCR específico para él. El laboratorio tiene un panel actualizado con los virus nuevos", indicó Santiago Melón.

En la mayoría del territorio nacional sólo se emplean métodos comerciales, que sirven para los virus que incluye la casa que los vende. Son sistemas cerrados y en los que no se puede incorporar un virus nuevo. "La mayor parte de los hospitales de España no tienen un laboratorio específico de virología, sino una parte general de microbiología. Sólo unos pocos, entre ellos el HUCA, tienen una sección de virología", subrayaron Melón y Vázquez.