La de ayer en el Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA) fue la primera conferencia y uno de los primeros actos culturales con público celebrados en Asturias tras la finalización del estado de alarma por el coronavirus. Los asistentes tuvieron que reservar su plaza con antelación. Siguieron la clausura del curso con las mascarillas puestas en todo momento y dejando un asiento vacío entre cada uno. Los museos, los centros de arte y las salas de exposiciones, como el Bellas Artes en Oviedo, Laboral Centro de Arte en Gijón o la galería Borrón, en Oviedo, fueron los primeros en abrir al público y reanudar sus actividades, en el sector cultural, durante las últimas semanas del confinamiento.