Las mujeres llevan la moda en la piel y ya se tatúan tanto como los hombres

El tatuaje, una de las grandes tendencias de moda urbana del siglo XXI, ha dejado atrás el viejo cliché de ser cosa de hombres. Uno de cada tres españoles de entre 18 y 35 años lleva algún "tattoo", según estimaciones de la Academia Española de Dermatología, y España es el sexto país con más gente tatuada en el mundo, en términos relativos. Ahora, además, las mujeres igualan a los hombres en el número de tatuajes. Según un estudio de "Tattoox", la mayor plataforma nacional del sector, el 47,5% del total de trabajos en la piel que se realizaron durante 2022 fueron en mujeres. "Este dato es especialmente significativo ya que supone un paso más en la desestigmatización del tatuaje y en su proceso de convertirse en una moda ‘mainstream’ y popular", en opinión de Joel Orteu, cofundador y CEO "Tattoox" –que se conoce popularmente como el "Tinder de los tatuajes", porque se dedica a poner en contacto a sus usuarios con su tatuador ideal, teniendo en cuenta su ubicación, sus preferencias, el estilo y las características que desean–. Desde 2021, cuando echó a andar, recibe más de 4.000 solicitudes mensuales para una comunidad que suma más de 1.500 tatuadores, un tercio de ellos repartidos entre Madrid y Barcelona.

"Cada vez es más común la presencia de mujeres en estudios de tatuajes, y muchas acuden por primera vez. Se trata de algo que, sin duda, contribuye positivamente al sector y que ayudará a borrar mitos y tópicos", subraya Orteu. El tatuador ovetense Adri Reigada, que tiene su base en Madrid y viaja por medio mundo para atender su agenda de clientes, tiene entre ellos tantos hombres como mujeres. "Yo diría que el 50 por ciento de ellos son chicas", calcula, y lo mismo en los profesionales, entre los que dice que cada vez hay más mujeres tatuadoras.

A la incorporación masiva de las mujeres al tatuaje ha contribuido, en opinión de Adri Reigada, la diversificación de estilos, con muchos entre los que elegir, y que "socialmente no está mal visto, como ocurría antes", continúa explicando. El tatuaje se ha convertido en "algo global, está en auge, hay demanda y oferta". Él, sin ir más lejos, tiene programados viajes de trabajo a Viena, Londres, Zurich y Los Angeles a partir de abril; en Semana Santa se pasará por Asturias, también para tatuar.

Su clientela se concentra en la franja de edad que va de los 25 a los 35 años y cuando acuden a él lo hacen buscando una obra única. "Mucha gente empieza por un tatuaje que tiene un significado, luego hay un componente estético importante. Engancha, tras el primero se quita el miedo", cuenta. Para él, que se formó en diseño industrial entre Avilés y Barcelona y dejó un trabajo de oficina para ser tatuador, el del "tattoo" es "un arte" y cada artista tiene su propio estilo. El suyo es "un poco surrealista", con motivos de buen tamaño, una técnica puntillista, efectos de movimiento y desenfoque, y exclusivamente con tintas negras y grises.

Laura Cubero, organizadora de la Barcelona Tattoo Expo, que se celebró en la capital catalana el último fin de semana de febrero y es una de las mayores convenciones de Europa, afirma que la entrada masiva de las mujeres en los círculos del tatuaje comenzó "a partir del 2000, cuando empezaron a ser más visibles y, desde luego, mejor vistos". "Gente conocida empezó a lucir sin pudor sus ‘tattoos’, rompiendo una lanza tanto por los hombres como por las mujeres". Hoy en día, añade, "en un evento como la Barcelona Tattoo Expo puedes ver la misma cantidad de mujeres y hombres".

Laura Cubero dice que las mujeres se fijan más en el diseño y la posición de los tatuajes. "Miramos más que visualmente sea estético y acompañe las formas del cuerpo; quizá los hombres buscan más una pieza y ese dibujo puede hacerse en cualquier parte del cuerpo", argumenta la experta.

En lo que respecta a la edad, el tatuaje sigue siendo algo eminentemente juvenil, según el informe de "Tattoox". El 62% de los tatuajes realizados en España en 2022 se hicieron en personas de entre 20 y 30 años. Las personas de entre 30 y 45 años representaron el 27% del total, mientras los más jóvenes, aquellos con edades comprendidas entre los 18 y 20 años, fueron el 11%.

En cuanto a las zonas corporales en las que más tatuajes realizaron en 2022, destaca por encima de cualquier otra el brazo, que sigue siendo la opción elegida por más del 50% de los españoles –concretamente el 54%–. A mucha distancia le siguen la pierna, el 12%, y la espalda, solamente el 9% de los españoles.

El 21% de los españoles se decanta por un estilo realista; a continuación, con el 20% , por el "black work", un trabajo exclusivamente con tinta negra, con altos contrastes, sin sombras ni tonos grises; en tercera posición, el 19%, está el "fineline", tatuajes de trazo fino y discretos, más simples y que parecen más sofisticados y sutiles. A ese respecto, Laura Cubero detecta diferencias entre hombres y mujeres. "Yo diría que los estilos son unisex, pero quizá el motivo es lo que diferencia un tatuaje de otro. En el caso de las mujeres suelen ser muy personales y plasmar un momento vital de sus vidas". En los cuatro años que lleva como profesional, Adri ha comprobado que "los muy oscuros son más de chicos; ellas son más de línea fina, de tatuajes más sutiles".

No hay sorpresas sobre las regiones con más tatuajes. El 37% se han realizado en Madrid y el 24% en Barcelona. En el "top 3", pero a una distancia considerable, está Valencia, con el 8% del total de tatuajes del país.

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